Un jurado popular absuelve al que fuera policía de Fresno

Genaro Carmona, el que fuera único policía de Fresno del Torote, ya no tiene cuentas pendientes con la ley. Un jurado popular le absolvió ayer del delito de malversación del que estaba acusado.

La fiscal reclamó un año y un mes de prisión y una multa de 540 euros (90.000 pesetas) para Genaro, de 41 años, por haberse quedado con 585 euros (100.000 pesetas) del presupuesto del Ayuntamiento para las fiestas municipales en 1996.

Durante el juicio, Genaro hizo hincapié en que la alcaldesa le entregó 1.502 euros mediante un talón para los gastos de las fiestas y manifestó que posterior...

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Genaro Carmona, el que fuera único policía de Fresno del Torote, ya no tiene cuentas pendientes con la ley. Un jurado popular le absolvió ayer del delito de malversación del que estaba acusado.

La fiscal reclamó un año y un mes de prisión y una multa de 540 euros (90.000 pesetas) para Genaro, de 41 años, por haberse quedado con 585 euros (100.000 pesetas) del presupuesto del Ayuntamiento para las fiestas municipales en 1996.

Durante el juicio, Genaro hizo hincapié en que la alcaldesa le entregó 1.502 euros mediante un talón para los gastos de las fiestas y manifestó que posteriormente justificó los pagos con las facturas que acumuló.

Según explicó, al analizar las facturas con el tesorero, la secretaria y la alcaldesa, salió un saldo a su favor, porque había puesto dinero de su bolsillo "y no era la primera vez", dijo. "Cuando entregué las facturas nadie cuestionó nada", afirmó el procesado, quien también fue denunciado por la sustracción de una taladradora y por el supuesto cobro de comisiones por la colocación de sepulturas en el cementerio, de lo que ya había sido absuelto anteriormente.

En marzo de 1998 unos 500 vecinos de Fresno del Torote se manifestaron contra la decisión del Ayuntamiento de suprimir el cuerpo de Policía Local por falta de medios económicos. Carmona, el único miembro de ese cuerpo, fue relegado a otras tareas como trabajar de barrendero y picar piedra, lo que su defensa considera la prueba de la persecución a la que el acusado ha estado sometido desde entonces.

"Llevo cinco años perseguido por el Ayuntamiento, que me ha puesto ocho contenciosos. Y todo por 100.000 pesetas que se ha demostrado que no me llevé", afirmó ayer Genaro. "Soy un policía con titulación y me obligaron a picar piedra y a recoger hierbajos", declaró el ex agente para el que la caza a la que el Ayuntamiento le ha sometido es una prueba de la "España negra, pero de 2003".

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