Mejor atención y más igualdad

"La plena integración pasa por el empleo, pero también hay que tener en cuenta que los grandes discapacitados nunca podrán trabajar", plantea Mario García, presidente del Comité Español de Representantes de Minusválidos (CERMI), que agrupa a más de 2.500 asociaciones.

La atención a las personas con gran discapacidad recae masivamente en las familias. Los servicios sociales sólo atienden "al 5%", afirma García. "Hace falta crear centros especializados donde se les atienda y que no sean aparcamientos. Hay una carencia tremenda de plazas", asegura.

El CERMI confía en que el Año Euro...

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"La plena integración pasa por el empleo, pero también hay que tener en cuenta que los grandes discapacitados nunca podrán trabajar", plantea Mario García, presidente del Comité Español de Representantes de Minusválidos (CERMI), que agrupa a más de 2.500 asociaciones.

La atención a las personas con gran discapacidad recae masivamente en las familias. Los servicios sociales sólo atienden "al 5%", afirma García. "Hace falta crear centros especializados donde se les atienda y que no sean aparcamientos. Hay una carencia tremenda de plazas", asegura.

El CERMI confía en que el Año Europeo de las Personas con Discapacidad, establecido por la UE, permita mejorar su situación. Las esperanzas se concretan, por ejemplo, "en la aprobación de una ley de no discriminación y acceso universal a todos los ámbitos que consagre la igualdad de oportunidades para los discapacitados", explica García. Considera que de la Ley de Integración del Minusválido (LISMI) de 1982 sólo se ha desarrollado "el 30%". También pide un plan estatal de accesibilidad que elimine las barreras arquitectónicas y de comunicación y "unifique" los criterios en todas las comunidades autónomas.

Por su lado, el Ministerio de Trabajo maneja ya el borrador de una nueva LISMI y ha acordado la creación de una agencia de empleo para discapacitados, entre otras medidas.

"Nuestra situación ha mejorado en los últimos años, pero aún no podemos sentirnos tratados como ciudadanos de primera", concluye García.

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