Dos obreros mueren aplastados en las obras del AVE a Valladolid

Las víctimas fallecieron al caerles encima dos tolvas con 320 toneladas de escombros

Dos trabajadores del túnel del futuro tren de alta velocidad (AVE) Madrid-Valladolid, que transcurre bajo la sierra de Guadarrama, murieron ayer después de que les cayeran encima 320 toneladas de escombros. Las víctimas estaban bajo dos tolvas que recogen el material extraído del futuro túnel, cuando, por causas todavía no esclarecidas, cedió uno de los depósitos y sepultó a un trabajador. Mientras sus compañeros estaban ayudando a sacarlo, por el llamado efecto dominó, cayó la segunda tolva y sepultó a otro obrero. Un tercero resultó herido grave.

El accidente ocurrió a l...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Dos trabajadores del túnel del futuro tren de alta velocidad (AVE) Madrid-Valladolid, que transcurre bajo la sierra de Guadarrama, murieron ayer después de que les cayeran encima 320 toneladas de escombros. Las víctimas estaban bajo dos tolvas que recogen el material extraído del futuro túnel, cuando, por causas todavía no esclarecidas, cedió uno de los depósitos y sepultó a un trabajador. Mientras sus compañeros estaban ayudando a sacarlo, por el llamado efecto dominó, cayó la segunda tolva y sepultó a otro obrero. Un tercero resultó herido grave.

El accidente ocurrió a las 13.35 en la vertiente sur del futuro túnel, que tendrá 25 kilómetros de largo. Estos trabajos se desarrollan a la altura del kilómetro 3 de la M-611, en el término municipal de Miraflores de la Sierra. Según fuentes de la obra, los dos trabajadores se encontraban en la parte más alejada de la entrada al túnel. Estaban junto a una hilera de seis tolvas que, a través de una cinta transportadora, reciben todo el escombro y la piedra que extraen las tuneladoras.

El primer trabajador fallecido estaba realizando tareas auxiliares de instalación eléctrica. El segundo trabajador colaboraba en las labores de transferencia de carga en los vagones que transportan el escombro. De repente, el primer depósito se derrumbó y atrapó a un trabajador por un brazo. Sus compañeros intentaron rescatarle. Acto seguido, y sin que les diera tiempo a ponerse a salvo, se vino abajo el segundo y tercer contenedor. Todos tenían una altura de unos siete metros y están levantados sobre cuatro patas bajo las que circulan trenes de mercancías que trasladan el escombro fuera de la obra.

El segundo derrumbe atrapó a otros dos trabajadores, además del primer herido. Uno de ellos murió en el acto, debido al escombro que le cayó encima. Un tercer obrero resultó herido grave y fue trasladado en una ambulancia de la obra al hospital de La Paz.

Los bomberos de la Comunidad de Madrid desplazaron al lugar del accidente cuatro dotaciones, que intentaron rescatar a las víctimas. La primera en poder ser extraída del lugar fue Ángel Martínez Rubio. Su cuerpo fue trasladado al tanatorio de Colmenar Viejo, donde hoy se le practicará la autopsia. El velatorio tendrá lugar en el cementerio de Alcorcón.

El rescate de Martínez fue sencillo, ya que se encontraba justo cerca de la caseta desde la que se controlan las tareas de llenado y vaciado de las tolvas.Mucho más difícil resultó el rescate del segundo operario: cuando los bomberos y personal de la empresa constructora estaban comenzando a retirar la grava que cubría al segundo fallecido, surgió la voz de alarma. Las tres tolvas restantes que estaban aún en pie comenzaron a moverse de forma muy peligrosa y el jefe de los bomberos ordenó la retirada inmediata.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Potentes grúas

Al ver el riesgo que corrían las personas, los bomberos decidieron utilizar grandes grúas móviles de las obras para levantar las tolvas derrumbadas y poder recuperar el cadáver de la segunda víctima. Se precisaron varias máquinas para asegurar que no se movían durante el rescate y que las otras tres no caían por el denominado efecto dominó, al igual que ocurrió con las otras dos. Las labores se vieron dificultadas por las bajas temperaturas, la lluvia y la niebla que se registraron durante toda la tarde. Al final, y tras asegurar todo el amasijo de hierros en que quedaron convertidos los depósitos, los bomberos sacaron el cadáver de la segunda víctima a las ocho de la noche, seis horas y media después de que se produjera el accidente. Del fallecido sólo trascendió que era un inmigrante.

A pesar de que los obreros relataron que no había más víctimas, la Guardia Civil utilizó perros especializados en rastreo para comprobar que no se quedó atrapado ningún obrero más. Al lugar se desplazó una UVI móvil del Summa que sólo pudo certificar las muertes de los empleados. También atendió a dos compañeros de los fallecidos de crisis nerviosas.

Antonio Rodríguez Treviño, responsable de Salud Laboral de construcción de UGT-Madrid, criticó que el accidente se produjera en unas obras ejecutadas por el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF): "A algunos políticos se les llena la boca con que sus obras son seguras y luego se demuestra, con accidentes como el de ayer, que las cosas no van tan bien", explicó. "La cimentación permaneció intacta. Lo que ha fallado ha sido la estructura que, al no aguantar el peso, se ha colapsado y se ha caído", concluyó. El GIF ha abierto una investigación para esclarecer las causas y delimitar responsabilidades por lo ocurrido ayer.

El AVE Madrid-Valladolid estará listo en 2005. Las obras, ejecutadas por un consorcio de empresas, costarán 2.100 millones de euros. Ambas ciudades quedarán enlazadas en menos de 55 minutos, ya que los trenes alcanzarán velocidades de hasta 350 kilómetros por hora.

Estado en que quedaron las tolvas que sepultaron a los dos obreros del futuro AVE Madrid-Valladolid.SANTI BURGOS

Archivado En