OPINIÓN DEL LECTOR

Brunete, sin reconciliar

La reconciliación no ha llegado a Brunete. Eso es lo que parece después de lo ocurrido en el pleno del Ayuntamiento, en el que el Partido Popular votó en contra de una moción presentada por el grupo socialista, en la que se recogía el texto aprobado por el Congreso de los Diputados el pasado 20 de noviembre, y que, casualidades de la vida, fue firmada por el propio Partido Popular.

El portavoz socialista tuvo que aguantar el cántico del Cara al sol por parte de uno de los asistentes al pleno y frases del tipo "vete a Rusia con Zapatero". Y el alcalde, siguiendo la máxima de "mata...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La reconciliación no ha llegado a Brunete. Eso es lo que parece después de lo ocurrido en el pleno del Ayuntamiento, en el que el Partido Popular votó en contra de una moción presentada por el grupo socialista, en la que se recogía el texto aprobado por el Congreso de los Diputados el pasado 20 de noviembre, y que, casualidades de la vida, fue firmada por el propio Partido Popular.

El portavoz socialista tuvo que aguantar el cántico del Cara al sol por parte de uno de los asistentes al pleno y frases del tipo "vete a Rusia con Zapatero". Y el alcalde, siguiendo la máxima de "matar al mensajero", lo que hizo fue expulsar al portavoz socialista, según él, por no respetar el turno de palabra.

Otra de las lindezas del alcalde fueron las declaraciones a los medios de comunicación, en las que decía que "Brunete es un municipio integrado y todo esto es una campaña que ni siquiera viene de los socialistas de Brunete, sino que está orquestada desde más arriba". Esto me recuerda a la tristemente célebre "conspiración judeo-masónica".

En estos últimos años son varios los autores que se han interesado por temas que afectan a Brunete, como la utilización de presos republicanos para obras civiles o para la reconstrucción de este municipio, en que hoy vivo. Uno de los últimos es precisamente Esclavos por la patria, de Isaías Lafuente. En el prólogo del libro Los años difíciles dice Iñaki Gabilondo: "Si lo que hemos contado en la radio y los contenidos de este libro tuvieran que llevar un sello, del tipo de los que dicen "confidencial" o "reservado", en el nuestro estaría escrito: generosidad". Pero esa generosidad no existe en Brunete.

Nuestra transición democrática ha sido un modelo para muchos y ha venido acompañada de una gran generosidad por parte, sobre todo, de los "vencidos". Pero si queremos ser ecuánimes, el mantenimiento de placas que conmemoran "el glorioso alzamiento nacional" o "la gloriosa cruzada de liberación", requiere como acto de justicia que también existan placas que conmemoren a los que defendieron otras ideas distintas y que, por cierto, llegaron al poder mediante unas elecciones democráticas. Aunque considero que lo deseable sería que desaparecieran todas. Actitudes como las del PP de Brunete hacen que se considere cierta aquella afirmación que dice que en España no hay una extrema derecha fuerte, porque ésta se encuentra en el interior del PP.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En