El corte clásico regresa a la moda de piel para el próximo invierno

La moda en piel para el próximo invierno muestra su cara más salvaje en los desfiles que el salón Pielespaña ha ofrecido desde el viernes en el recinto ferial de Montjuïc 1, antes de la clausura mañana. Los tonos naturales, ligeramente tostados o manchados, y las prendas de corte clásico, con algunos flecos de actualidad, destacan entre las tendencias. Los colores a la moda en piel se los sacó ayer una veintena de ecologistas acompañados de media docena de perros que, apostados frente al edificio de desfiles protagonizaron un acto de protesta por el uso de pieles de animales en la moda y por e...

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La moda en piel para el próximo invierno muestra su cara más salvaje en los desfiles que el salón Pielespaña ha ofrecido desde el viernes en el recinto ferial de Montjuïc 1, antes de la clausura mañana. Los tonos naturales, ligeramente tostados o manchados, y las prendas de corte clásico, con algunos flecos de actualidad, destacan entre las tendencias. Los colores a la moda en piel se los sacó ayer una veintena de ecologistas acompañados de media docena de perros que, apostados frente al edificio de desfiles protagonizaron un acto de protesta por el uso de pieles de animales en la moda y por el mal trato que, según denuncian, ejerce el negocio peletero en animales criados en cautividad y por el tráfico de otros en peligro de extinción.

La piel se afianza en el mundo de la moda con propuestas de estilo clásico. Lo más llamativo lo constituyen las asimetrías, los estampados y el tratamiento de las pieles. Las formas irregulares, con cuellos, mangas y bajos de las prendas asimétricos, estampados que dan a la piel un aspecto envejecido, flecos, trenzados y bordados sobre ante, costuras reforzadas con puntadas ficticias, y aplicaciones de pelo largo sobre prendas de doble faz, son, junto a pieles de alta calidad, sus principales argumentos competitivos.

Destaca el ante, un tipo de serraje, normalmente elaborado con piel de cerdo, que cada vez imita con más precisión las texturas textiles, y se utiliza para hacer prendas sujetas a un alto movimiento anatómico, como camisas, vestidos y pantalones, y ahora tops y hasta ropa interior; pero mantienen su liderazgo las napas, en brillo o mates, materiales que han sido elaborados en tenerías que utilizan cueros de cordero o cabra, y con las que se confeccionan la mayoría de prendas de vestir que este material propone en las pasarelas.

La piel de conejo

La prensa para el próximo invierno de máxima tendencia será de acabado en doble faz, desde cazadoras a ponchos, botas, abrigos largos o chaquetones. Se trata de una piel de cordero napado, cuyo revés de pelo largo da origen a puños, cuellos y solapas amplios y asimétricos. De igual manera funciona la piel de conejo, una alternativa mucho más económica y cuyos acabados, en pelo largo o rasado y fáciles de tintar, dan al conejo un valor de actualidad.

En el desfile de ayer destacó la técnica del patchwork empleada por el diseñador Carlos Ponce en una colección de prendas entalladas con líneas asimétricas en la que destacaban las costuras de lana y las aplicaciones metálicas. Shasa mostró prendas de abrigo en doble faz y cueros napados, acabados con flecos. City Benet ofreció prendas ligeras confeccionadas con pieles envejecidas; Munper incluye propuestas masculinas en las que los chaquetones largos y rectos reciben el mismo tratamiento en cuellos y solapas que las femeninas; Aznarez saca pieles con apariencia de ganchillo, y Pell Xavier se vale de la técnica patchwork para presentar una de las colecciones más coloristas con aplicaciones de plata sobre ante rojo.

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