Reencuentro con el pasado

Fermín Cuesta Bravo, padre de la actriz y cantante María del Pilar Cuesta Acosta, popularmente conocida como Ana Belén, recibió en Segovia una grata sorpresa al reencontrarse con el hostelero jubilado Juan Herrero Rubio, un viejo amigo de su paso por tierras segovianas, al que no veía desde hacía más de 50 años. Varios familiares, entre quienes se encontraban su esposa, Pilar Acosta, y su hermana Natividad Cuesta, le taparon los ojos mientras que unos amigos entraban por la puerta con el misterioso personaje. Sin embargo, sólo tuvo que oírle hab...

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Fermín Cuesta Bravo, padre de la actriz y cantante María del Pilar Cuesta Acosta, popularmente conocida como Ana Belén, recibió en Segovia una grata sorpresa al reencontrarse con el hostelero jubilado Juan Herrero Rubio, un viejo amigo de su paso por tierras segovianas, al que no veía desde hacía más de 50 años. Varios familiares, entre quienes se encontraban su esposa, Pilar Acosta, y su hermana Natividad Cuesta, le taparon los ojos mientras que unos amigos entraban por la puerta con el misterioso personaje. Sin embargo, sólo tuvo que oírle hablar unos segundos para identificarle y fundirse con él en un abrazo, comenzando una larga conversación de casi tres horas, llena de anécdotas y recuerdos. Fermín Cuesta, de 79 años, comenzó de pinche de cocina en el desaparecido hotel Victoria, en plena plaza Mayor segoviana, cuando apenas contaba con 14, pocos años después en que se alojó a su llegada a Segovia el poeta Antonio Machado, en 1919, antes de pasar a una modesta pensión que era lo que entonces le permitía su sueldo de catedrático de instituto. En el repaso de la historia, donde no faltaron las referencias a la guerra civil, a Herrero no se le olvidó mencionar su liderazgo mundial en el juego del mus, mientras que los dos recordaron también a otro común amigo de la hostelería de aquella época, Julián Matesanz. El padre de la también directora de cine y esposa de Víctor Manuel, que luego fue cocinero del hotel Palace, de Madrid, a la vez que su esposa compartía las tareas de la casa con la portería de un inmueble en el barrio madrileño de Lavapiés, se refirió a las temporadas veraniegas que Ana Belén, la mayor de tres hijos, pasaba junto a su abuela Matilde Bravo, maestra del pueblo de Cabezuela (Segovia), donde aún le queda familia que, a modo de regalo navideño, ha recibido la Biografía de un mito. Retrato de una generación, que ha escrito sobre Ana Belén el periodista de EL PAÍS, Miguel Ángel Villena, quien sostiene que sin la retaguardia familiar, en la que se siente querida y arropada, ella no hubiera triunfado.

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