La intensidad del tráfico solivianta a los vecinos de la Travessera de Dalt
Los vecinos de la Travessera de Dalt han decidido movilizarse para exigir al Ayuntamiento de Barcelona que elimine dos de los seis carriles de esta vía, por la que en los días laborables circulan de 100.000 a 110.000 vehículos. Anoche salieron en manifestación hartos de soportar el ruido y la contaminación que les ocasiona el tráfico creciente. Las asociaciones de vecinos de Travessera de Dalt y de General Mitre convocaron la marcha, a la que se sumaron diversas plataformas vecinales descontentas con la falta de respuesta municipal que hasta ahora han tenido sus quejas.
Las entidades in...
Los vecinos de la Travessera de Dalt han decidido movilizarse para exigir al Ayuntamiento de Barcelona que elimine dos de los seis carriles de esta vía, por la que en los días laborables circulan de 100.000 a 110.000 vehículos. Anoche salieron en manifestación hartos de soportar el ruido y la contaminación que les ocasiona el tráfico creciente. Las asociaciones de vecinos de Travessera de Dalt y de General Mitre convocaron la marcha, a la que se sumaron diversas plataformas vecinales descontentas con la falta de respuesta municipal que hasta ahora han tenido sus quejas.
Las entidades informaron de las gestiones llevadas a cabo sin éxito hasta ahora en la asamblea celebrada en la iglesia de los Josepets de Gràcia, antes del inicio de la manifestación. En un escrito dirigido al alcalde de la ciudad, Joan Clos, el 15 de mayo daban cuenta del malestar reinante en la zona y adjuntaban las firmas de 3.300 vecinos. La entrevista que solicitaban mantener con Clos sobre el particular no se llegó a celebrar por problemas de agenda del alcalde. En la reunión que los representantes vecinales tuvieron con el concejal del distrito, Ferran Mascarell, no lograron ningún compromiso para aliviar de coches la Travessera de Dalt.
Después de constatar que tanto el ruido como la contaminación, lejos de reducirse, aumentan, las asociaciones impulsoras han decidido seguir los pasos de otros barrios, como Sant Martí, donde los vecinos de la Gran Via han conseguido gracias a sus movilizaciones que las administraciones asuman un proyecto de cobertura parcial de un amplio tramo de la autopista A-19.
El presidente de la AA VV de la Travessera de Dalt, Vicenç Massana, considera que ha llegado el momento de que el Ayuntamiento repare los daños causados por la Ronda del Mig, que la Administración franquista introdujo en una zona donde ya vivían miles de familias. Si los poderes públicos están dispuestos a aminorar el tráfico de la Gran Via, pese a que la autopista se levantó antes de que se edificaran la mayoría de los bloques, Massana se pregunta por qué razón no pueden reducir de seis a cuatro los carriles de la Travessera de Dalt desde Via Augusta a Alegre de Dalt.