El síndico mayor desafía al Parlament y abre una crisis institucional

Nicolàs suspende un pleno de la sindicatura, acosado por la Cámara y cuatro síndicos

El Parlament y la Sindicatura de Cuentas mantienen un enfrentamiento institucional sin precedentes por las resistencias del síndico mayor, Marià Nicolàs, a ampliar el número de auditores. La Cámara y cuatro de los siete síndicos le exigieron ayer que cubra cuanto antes las plazas para dar más celeridad al trabajo de la institución. Nicolàs respondió suspendiendo el próximo pleno de la sindicatura.

La Sindicatura de Cuentas -el órgano fiscalizador de las cuentas de la Adminitración- es un organismo de rango estatutario que depende del Parlament. En los últimos años ha acumulado grandes r...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Parlament y la Sindicatura de Cuentas mantienen un enfrentamiento institucional sin precedentes por las resistencias del síndico mayor, Marià Nicolàs, a ampliar el número de auditores. La Cámara y cuatro de los siete síndicos le exigieron ayer que cubra cuanto antes las plazas para dar más celeridad al trabajo de la institución. Nicolàs respondió suspendiendo el próximo pleno de la sindicatura.

La Sindicatura de Cuentas -el órgano fiscalizador de las cuentas de la Adminitración- es un organismo de rango estatutario que depende del Parlament. En los últimos años ha acumulado grandes retrasos en la entrega de los informes. Uno tan sensible como es el del caso Pallerols -de presunta financiación irregular de Unió a través de los fondos repartidos por Trabajo- tardó cuatro años, y se alegó, a modo de justificación, falta de recursos.

Para mejorar el funcionamiento de la entidad, el Parlament aprobó por unanimidad el pasado marzo autorizar a la sindicatura a crear 10 nuevas plazas de auditor y ayudante. No obstante, el síndico mayor, Marià Nicolàs, se resiste a convocarlas pese a contar con un superávit que según varias fuentes oscila entre 1,8 y 2,4 millones de euros. La oposición considera que con esta actitud Nicolàs trata de mantener al ralentí la institución.

Ayer todos los grupos de la Cámara aprobaron una moción del grupo socialista para instar a la sindicatura a aumentar el número de auditores 'lo más rápidamente posible'. En un hecho sin precedentes, la Mesa del Parlament también aprobó una resolución para dejar claro que la única responsabilidad de que no se hayan creado estas plazas recae en la propia sindicatura.

Rebelión en la sindicatura

La presión sobre el síndico mayor no procede sólo del Parlament. Ayer mismo, cuatro de los siete síndicos entregaron un documento en el registro de la entidad para exigir 'la convocatoria inmediata' de las oposiciones y que el próximo pleno de la entidad apruebe una resolución por la que se inste al síndico mayor a cumplir con este compromiso. La propuesta -firmada por síndicos avalados en su día por el PSC, el PP y CiU- se aprobará con toda seguridad porque los cuatro firmantes suman mayoría absoluta y supone una rebelión frente al síndico mayor.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Nicolàs respondió al envite de la Cámara y de los síndicos suspendiendo el pleno previsto para el próximo martes, según fuentes de la entidad. El Parlament aprobó también solicitar una ampliación del informe sobre el Instituto Catalán de Finanzas.

Archivado En