Los beneficios empresariales desatan la euforia en las bolsas mundiales

Las bolsas no encuentran un término medio. La mejoría en los resultados empresariales de grandes corporaciones estadounidenses y europeas desató la euforia entre los inversores, que recogieron los datos como un síntoma de recuperación de la crisis económica tras las fuertes caídas de semanas anteriores. El Ibex 35 de la Bolsa española subió el 5,11% (la tercera mayor alza del año); París, con el 6,96%, y Londres, con un 5,05%, registraron sus mayores ganancias del ejercicio. Alemania ganó al cierre el 6,95%, su segunda mayor subida, y Nueva York subió el 4,8% y el Nasdaq un 5,07%.

El ún...

Las bolsas no encuentran un término medio. La mejoría en los resultados empresariales de grandes corporaciones estadounidenses y europeas desató la euforia entre los inversores, que recogieron los datos como un síntoma de recuperación de la crisis económica tras las fuertes caídas de semanas anteriores. El Ibex 35 de la Bolsa española subió el 5,11% (la tercera mayor alza del año); París, con el 6,96%, y Londres, con un 5,05%, registraron sus mayores ganancias del ejercicio. Alemania ganó al cierre el 6,95%, su segunda mayor subida, y Nueva York subió el 4,8% y el Nasdaq un 5,07%.

El único motor capaz de dar la vuelta o de restar las importantes pérdidas acumuladas en el año en las bolsas es el beneficio de las empresas. Los datos del tercer trimestre ya son suficientemente elocuentes de cómo terminarán las compañías el año y los inversores se agarraron ayer con fuerza a estos datos, después de los positivos anuncios realizados por grandes compañías europeas y estadounidenses.

En definitiva, se trata de conocer cómo la crisis que viven las economías se traslada a los resultados empresariales. Si las empresas pueden ganar dinero, incluso más que en el pasado ejercicio, el duro castigo que han soportado no se justifica y es el momento de comprar.

Ya las bolsas europeas abrieron con optimismo por la reducción de pérdidas en la firma de electróncia Philips y por el crecimiento en los resultados de la firma de lujo LVMH. Unos datos que permitían ganancias en torno al 3% en los distintos indicadores. Y eso pese a la mala evolución de la producción industrial en Italia, muy afectada por la crisis del grupo Fiat.

La apertura de Wall Street reafirmó esta tendencia y amplió las ganancias de los distintos índices. Los buenos resultados de Citigroup, General Motors, Bank of America, Johnson & Johnson, Delta Airlines o Wells Fargo destaparon el optimismo entre los inversores, que se lanzaron a comprar. Estas compañías contagiaron a sus compañeras de sector, permitiendo la fuerte subida de los mercados.

En Estados Unidos se conoció también que las ventas de las empresas subieron un 0,2% durante el mes de agosto respecto al mes anterior, mientras que las existencias (stocks) se reducían el 0,1%, según los datos anunciados ayer por el Departamento de Comercio estadounidense.

El resultado fue que se produjeron unas de las mayores subidas del año. El Ibex 35 se anotó una ganancia del 5,11%. París subió el 6,96%; Londres, el 5,05%, y Francfort, el 6,95%. El mercado alemán registró la segunda mayor subida del ejercicio con alzas superiores al 8% para las entidades financieras como Deutsche Bank o Allianz. Destacó la firma Marschollek, que ganó más de un 25%.

Impulso bancario

Las alzas afectaron a los valores más castigados hasta la fecha. En el caso de la Bolsa española, los bancos han sido los más favorecidos y el BBVA subió el 9,87%, mientras que SCH ganó el 9,43%. Endesa y Telefónica han ganado más de un 6%, mientras que Repsol subió un 4%. Sogecable ganó el 13% ante las expectativas de que haya fusión en las plataformas digitales. Sol Meliá se apuntó una subida del 12%, tras la caída de la víspera por el atentado de Bali. Los valores defensivos, como Red Eléctrica, Altadis, Acesa y Banco Popular terminaron con descensos.