La Plataforma del Ebro ha recogido 6.000 alegaciones al minitrasvase
La Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) ha recogido ya más de 6.000 firmas en contra de la conexión del Consorcio de Aguas de Tarragona y el de Aguas del Ter-Llobregat para llevar a cabo el proyecto de minitrasvase del Ebro a Barcelona. La plataforma se propone recoger otros varios miles de firmas antes del 5 de septiembre, fecha en que termina el plazo de presentación de alegaciones.
La plataforma intenta recabar la adhesión de municipios receptores en teoría del agua del trasvase, y uno de sus primeros objetivos era lograr la adhesión del de Barcelona. La oportunidad era el pregón de ...
La Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) ha recogido ya más de 6.000 firmas en contra de la conexión del Consorcio de Aguas de Tarragona y el de Aguas del Ter-Llobregat para llevar a cabo el proyecto de minitrasvase del Ebro a Barcelona. La plataforma se propone recoger otros varios miles de firmas antes del 5 de septiembre, fecha en que termina el plazo de presentación de alegaciones.
La plataforma intenta recabar la adhesión de municipios receptores en teoría del agua del trasvase, y uno de sus primeros objetivos era lograr la adhesión del de Barcelona. La oportunidad era el pregón de las fiestas de la Cinta, en Tortosa, el pasado domingo, en el que el alcalde barcelonés, Joan Clos, hacía de pregonero. El alcalde decepcionó durante el pregón en el auditorio Felip Pedrell porque no hubo vehemencia en sus declaraciones sobre el Plan Hidrológico Nacional (PHN) -aunque sí elogió la lucha de la población de las tierras del Ebro contra la detracción de agua- y no hizo explícita una postura pública contraria al trasvase hasta Barcelona.
Costó un tanto, pero finalmente la plataforma consiguió arrancar del alcalde una afirmación tajante: la capital no necesita el agua del Ebro ni la ha pedido; es más, el consumo de agua en Barcelona ha descendido en los últimos años. Los miembros de la PDE esperaban que Clos se mostrara contrario al trasvase del Ebro a Barcelona durante la lectura del pregón, pero esta declaración no se formalizó hasta una reunión posterior entre el alcalde con cinco representantes de la organización antitrasvase y el alcalde de la capital del Baix Ebre, Joan Sabaté.
Otoño caliente
Fue al final de la reunión cuando Clos se mostró contrario a la recepción de agua del Ebro en Barcelona. 'No la necesitamos', dijo, y a continuación criticó abiertamente que la conexión de las redes del Consorcio de Aguas de Tarragona y las de Aguas del Ter-Llobregat se haya hecho pública en pleno mes de agosto. Para Clos, esta forma de tramitar el proyecto es una argucia con la que el Gobierno catalán pretende presentar la ciudad de Barcelona como la primera beneficiaria del trasvase.
Manuel Tomàs, portavoz de la PDE, recordó que el proyecto de conexión de las redes permite técnicamente el envío a Barcelona de los 190 hectómetros cúbicos de agua del Ebro previstos en el PHN, por lo que, de hecho, para los miembros de la plataforma, 'esto es el inicio del PHN', así que se prevé un 'otoño caliente'.