El obispo de Bilbao transmite al párroco de Maruri su 'apoyo incondicional'
El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, expresó el pasado fin de semana por teléfono su 'apoyo incondicional' al párroco de Maruri, Jaime Larrinaga, quien lleva escolta tras el envío de una carta de la corporación municipal a los vecinos en la que se le tildaba de 'nostálgico del franquismo'. El propio Larrinaga explicó ayer que Blázquez le llamó por teléfono después de haber acudido a su parroquia el sábado para mostrarle su solidaridad cuando él se encontraba ausente.
Larrinaga señaló que no será posible que se reúna con el obispo, pues Blázquez está de viaje.
Las críticas al Ay...
El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, expresó el pasado fin de semana por teléfono su 'apoyo incondicional' al párroco de Maruri, Jaime Larrinaga, quien lleva escolta tras el envío de una carta de la corporación municipal a los vecinos en la que se le tildaba de 'nostálgico del franquismo'. El propio Larrinaga explicó ayer que Blázquez le llamó por teléfono después de haber acudido a su parroquia el sábado para mostrarle su solidaridad cuando él se encontraba ausente.
Larrinaga señaló que no será posible que se reúna con el obispo, pues Blázquez está de viaje.
Las críticas al Ayuntamiento por buzonear la carta contra el párroco ha motivado que un grupo de vecinos de la localidad cree la comisión Maruri Ongi Etorri (Bienvenido a Maruri) para apoyar al consistorio y 'limpiar el nombre del pueblo' de las 'descalificaciones' que recibieron. Con este fin, está recogiendo firmas que serán entregadas al párroco, al consejo pastoral y al Ayuntamiento.
El alcalde de la localidad, el peneuvista Joseba Alzaga, dijo ayer que la comisión tiene derecho a constituirse si no supone más enfrentamiento. Alzaga agregó que el pueblo ha sufrido con la polémica que generó un asunto que, en su opinión, no debía rebasar los límites municipales.
El alcalde cree que Maruri Ongi Etorri puede servir para encauzar el malestar de los vecinos. El martes, la comisión organizó una concentración en el centro del pueblo en la que se leyó un manifiesto de apoyo al Ayuntamiento y rechazo de los radicalismos que a raíz de la polémica se atribuyeron al municipio.