El rebote de Helguera

'Me jode. Esperaba ser titular'. Pocos suplentes lo llevan peor que Helguera. O, al menos, no son tan expresivos: 'Si no juego, me cabreo y, al contrario que la mayoría, no me voy por las ramas y lo digo porque lo siento y lo pienso'. Helguera, al que José Antonio Camacho sólo dio vuelo en el último tramo frente a Eslovenia, no teme que su mensaje se vuelva en su contra: 'Me da absolutamente igual lo que piense la gente, los titulares de prensa que se pongan. Me siento como me siento. Me jode no jugar, pero sé que es jodido'.

Desde luego, Helguera no asume de buen grado quedarse tras la...

'Me jode. Esperaba ser titular'. Pocos suplentes lo llevan peor que Helguera. O, al menos, no son tan expresivos: 'Si no juego, me cabreo y, al contrario que la mayoría, no me voy por las ramas y lo digo porque lo siento y lo pienso'. Helguera, al que José Antonio Camacho sólo dio vuelo en el último tramo frente a Eslovenia, no teme que su mensaje se vuelva en su contra: 'Me da absolutamente igual lo que piense la gente, los titulares de prensa que se pongan. Me siento como me siento. Me jode no jugar, pero sé que es jodido'.

Desde luego, Helguera no asume de buen grado quedarse tras la cortina, lo que para algunos es una comodidad o una situación transitoria. A él le basta un partido en la banqueta para encenderse. Si no es titular, no se siente partícipe, aunque, por supuesto, matiza que desea que los elegidos 'lo hagan lo mejor posible'. El banquillo le destempla, le resulta corrosivo, porque se tiene mucha fe: 'Siempre he creído en mí mismo. Pero, si ganarámos el Mundial, no seguiría decepcionado por no haber jugado el primer partido'. De sus palabras se deduce que está convencido de que no volverá al banquillo; 'Todos los años me cortan la cabecita en la selección y en el Madrid, en el que me fichan extranjeros [Flavio, Makelele...] y siempre acabo jugando'. ¿Por qué? 'Ni idea. Es cuestión de los entrenadores. Pero a mí me cuesta más que a otros'.

Helguera lleva 23 partidos internacionales y dos goles. No todos en el mismo puesto. Como en su club, en la selección alterna la defensa con el centro del campo, lo que, en teoría, le concede más posibilidades. Pero algunos técnicos le consideran un tanto disperso, proclive a perderse en batallas que no le corresponden. Él se inclina por jugar más adelantado, pero asegura que llegaría a sentirse defensa si le sostuvieran en ese puesto 'diez partidos'. 'Lo que no me gusta', advierte, 'es que un día me pongan en un sitio y otro en otro'. Frente a los eslovenos, Camacho le dio la alternativa en la media, donde tiene más competencia: Baraja, Albelda, Xavi, Sergio... Como central sólo Nadal le cierra el paso, salvo cuando el seleccionador se decida por Puyol como marcador. De momento, le vale con jugar... ya, frente a Paraguay.