Vigilantes de la calidad

Los españoles propietarios de un coche con más de cuatro años de antigüedad saben muy bien lo que es la ITV, la inspección técnica del vehículo que les permitirá seguir circulando sin problemas. Dieciocho de las estaciones ITV que hay en España pertenecen a TÜV Rheinland Ibérica, filial del grupo alemán TÜV, dedicado a la certificación de calidad, medio ambiente, prevención de riesgos laborales y seguridad industrial. TÜV cumple este año su 20º aniversario en España y lo celebra, entre otras cosas, con la reorganización de la empresa, un grupo que aglutina ya en España a 700 trabajadores y que...

Los españoles propietarios de un coche con más de cuatro años de antigüedad saben muy bien lo que es la ITV, la inspección técnica del vehículo que les permitirá seguir circulando sin problemas. Dieciocho de las estaciones ITV que hay en España pertenecen a TÜV Rheinland Ibérica, filial del grupo alemán TÜV, dedicado a la certificación de calidad, medio ambiente, prevención de riesgos laborales y seguridad industrial. TÜV cumple este año su 20º aniversario en España y lo celebra, entre otras cosas, con la reorganización de la empresa, un grupo que aglutina ya en España a 700 trabajadores y que factura al año más de 36 millones de euros.

La dispersión del grupo, presente tanto en formación laboral, como en certificación de calidad, medioambiental o en automoción, además de la propiedad de la empresa catalana Icict, que realiza la misma actividad pero en el ámbito regional, aconsejan una nueva estructura, según el consejero delegado Reinhart Kraege. A partir de ahora TÜV Rheinland Ibérica agrupará todas las actividades que no dependan de una concesión pública -como las ITV- en una nueva empresa denominada TÜV International. Esta nueva organización coincide con la ampliación de los servicios de la compañía a sectores en los que la certificación aún es muy incipiente. Así, TÜV ha empezado a realizar la inspección técnica de edificios y de embarcaciones de recreo.

La compañía, con 18 estaciones ITV, tiene en España 700 trabajadores y factura por encima de los 36 millones de euros

El objetivo, según manifiesta Kraege, es aumentar la cuota de mercado. En la actualidad, en automoción que es su actividad más importante, TÜV tiene una cuota de mercado de entre el 10% y el 15% en un sector, el de la inspección y la certificación, que se caracteriza por estar muy atomizado y por un auge creciente. Según Kraege, España ignoraba las certificaciones antes de entrar en la Comunidad Europea. A partir de ese momento, las empresas se fueron dando cuenta de que una certificación les supone, ante todo, valor añadido.

De este modo, TÜV Rheinland ha puesto su sello de calidad en compañías como Repsol, Inditex, Gas Natural, o Retevisión, entre otras, pero también en electrodomésticos, juguetes, parques infantiles, y hasta en una playa.