40.000 personas hacen cola para despedir a la reina madre
El príncipe Felipe presentó sus respetos
El príncipe Felipe acudió ayer al gran salón del Parlamento de Westminster para brindar su tributo personal a Isabel, la reina madre británica. Don Felipe se sumó al resto de la realeza europea, famosos y a miles de británicos que rinden este fin de semana respeto ante la muerte de la madre de la reina Isabel II.
El príncipe de Asturias pasó unos minutos en silencio, con expresión sombría, frente al féretro con los restos mortales de Elisabeth Bowes-Lyon, que yacen en el gran salón ceremonial del palacio de Westminster desde el viernes. También estuvieron otros miembros de la realeza c...
El príncipe Felipe acudió ayer al gran salón del Parlamento de Westminster para brindar su tributo personal a Isabel, la reina madre británica. Don Felipe se sumó al resto de la realeza europea, famosos y a miles de británicos que rinden este fin de semana respeto ante la muerte de la madre de la reina Isabel II.
El príncipe de Asturias pasó unos minutos en silencio, con expresión sombría, frente al féretro con los restos mortales de Elisabeth Bowes-Lyon, que yacen en el gran salón ceremonial del palacio de Westminster desde el viernes. También estuvieron otros miembros de la realeza como el príncipe Kyril de Bulgaria y famosos como el actor sir John Mills, que, a sus 94 años, lo hizo en silla de ruedas.
Por el otro lado del féretro, la cola de británicos y turistas permanece constante desde el viernes. A media tarde de ayer, unas 40.000 personas habían desfilado por el magnífico salón de Westminster para rendir sus respetos. La cola anoche aún bordeaba el Támesis y la espera se calculaba en unas ocho horas. Como el día anterior, el recinto permanecerá abierto casi toda la noche.
La propia Isabel II se sintió conmocionada con las señales de afecto de súbditos y foráneos. 'La reina se ha emocionado mucho por la cantidad de gente que está ofreciendo sus respetos', señaló Buckingham.
La muerte de la reina madre, hace ya ocho días, a los 101 años de edad, ha sido una prueba de fuego para los Windsor. Muchos temían cierta apatía del pueblo o, al menos, un distanciamiento de los solemnes ritos de preparación del funeral, que se celebrará el martes en la abadía de Westminster. No se ha repetido el clamor que estalló tras la desaparición de la princesa Diana, pero el pueblo británico ha salido en masa a la calle para despedir a la última emperatriz de India.
Vienticinco miembros de la realeza internacional y altos representantes de las iglesias católica y escocesa tienen previsto acudir a los funerales. El rey Juan Carlos y la reina Sofía, así como sus familiares, Constantino y Ana María de Grecia, se encuentran entre la lista de asistentes difundida ayer por el palacio de Buckingham. Camilla Parker Bowles, amante del príncipe Carlos, figura también entre los 2.000 invitados al funeral. El heredero de la corona y sus hermanos guardarán vigilia frente al féretro la noche anterior.