Gil intenta aprobar su plan urbanístico en vísperas de que el Supremo dicte sentencia en el 'caso de las camisetas'

El pleno municipal extraordinario convocado hoy por el alcalde de Marbella presentará dos sorpresas de última hora. Jesús Gil introdujo ayer en el orden del día, de forma totalmente imprevista, la aprobación del texto refundido del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad, rechazado en dos ocasiones por la Junta de Andalucía. Además el regidor ha decidido cambiar la ubicación de sus polémicas 3.000 viviendas para jóvenes, que en principio se iban a construir en unos terrenos calificados como suelo forestal, propiedad del empresario Ramón Mesa.

Gil ha convocado a las 6.000 p...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El pleno municipal extraordinario convocado hoy por el alcalde de Marbella presentará dos sorpresas de última hora. Jesús Gil introdujo ayer en el orden del día, de forma totalmente imprevista, la aprobación del texto refundido del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad, rechazado en dos ocasiones por la Junta de Andalucía. Además el regidor ha decidido cambiar la ubicación de sus polémicas 3.000 viviendas para jóvenes, que en principio se iban a construir en unos terrenos calificados como suelo forestal, propiedad del empresario Ramón Mesa.

Gil ha convocado a las 6.000 personas que hasta el momento han solicitado los famosos pisos sociales para que acudan al que puede ser el último pleno que presida antes de que el Tribunal Supremo decida sobre su inhabilitación por el caso camisetas. El concejal andalucista, Carlos Fernández, ha pedido que se refuerce la seguridad, para evitar que se 'caliente el ambiente'.

La sesión plenaria, que en teoría debía ser de carácter monográfico para presentar los pormenores del Plan de Viviendas, se presume complicada a la vista de complejidad de los asuntos que se someterán a debate. El alcalde pretende no sólo aprobar su plan urbanístico, sino también sacar adelante la primera fase de las viviendas a bajo coste anunciadas durante el congreso del GIL y el presupuesto municipal para este año, que asciende a 167 millones de euros.

Según la portavoz municipal socialista, Isabel García Marcos, el texto refundido que presentará hoy Gil 'no tiene nada que ver con el expediente de cumplimiento exigido por la Junta de Andalucía', cuando rechazó por segunda vez el PGOU de Marbella en julio de 1998.

El equipo de gobierno introduce incluso una modificación a su propio documento referido a las viviendas sociales, que en lugar de construirse en suelo forestal pasarán a desarrollarse en una finca situada al norte del Polígono La Ermita, delimitado al oeste por un codo de la autovía. 'Corrigen pero para peor', dijo García Marcos, que señaló que 'en lugar de ofertar suelo legal como pedía el Gobierno andaluz han elegido de nuevo unos terrenos ilegales'. La parcela, de más de 100.000 metros cuadrados, está contemplada en la revisión del PGOU que el propio Jesús Gil remitió en el año 1998 a la comisión provincial de Urbanismo como sistema general de áreas libres. El planeamiento elaborado por el GIL contemplaba además la construcción en dichos terrenos del parque periurbano de Ventevacia. El regidor dará luz verde hoy al inicio al inicio de un expediente de expropiación forzosa a la multitud de los propietarios de estos nuevos terrenos.

El GIL dará cuenta además del dictamen de la comisión de Hacienda para la petición de un crédito extraordinario de cinco millones de euros para la compra del suelo, y de la constitución de una sociedad municipal para gestionar los inmuebles. 'Están elaborando una estrategia para que la estafa quede impune', se lamentó García Marcos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En