El presidente de Caja Madrid apuesta por reducir el peso de los políticos en las cajas de ahorros

La entidad gana 486 millones de euros en 2001, un 11,4% más, con menores dotaciones

El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, tomó ayer posiciones en el debate político que envuelve a las cajas. Blesa se mostró favorable a limitar al 50% el peso de los representantes de administraciones públicas en los órganos de gobierno de las cajas de ahorro y que las cuotas participativas no estén dotadas de derechos de voto, para evitar que se retrase más su puesta en marcha. La entidad ganó 486 millones de euros en 2001 (81.000 millones de pesetas), un 11,4% más. Los créditos crecieron menos que en 2000, lo que permitió a la entidad dotar un 21% menos.

Blesa consideró 'irrenunc...

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El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, tomó ayer posiciones en el debate político que envuelve a las cajas. Blesa se mostró favorable a limitar al 50% el peso de los representantes de administraciones públicas en los órganos de gobierno de las cajas de ahorro y que las cuotas participativas no estén dotadas de derechos de voto, para evitar que se retrase más su puesta en marcha. La entidad ganó 486 millones de euros en 2001 (81.000 millones de pesetas), un 11,4% más. Los créditos crecieron menos que en 2000, lo que permitió a la entidad dotar un 21% menos.

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Blesa consideró 'irrenunciable' el propósito de limitar el peso de los representantes políticos, ya que si éstos superan el 50% del consejo, Bruselas cataloga la caja como pública y como ayudas estatales los créditos que concedan.

Blesa, que llegó a la caja a instancias del PP, insistió en que este problema no acababa 'por tener una representación política del 49,9%, sino porque los representantes de ayuntamientos y autónomías sean profesionales'. El presidente de Caja Madrid se mostró a favor de que la representación política sea proporcional y que no se impongan todos los representantes del partido mayoritario, como ha hecho el presidente de la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana, en Bancaja.

En relación a las cuotas participativas -una figura similar a las acciones- se mostró partidario de que no estén dotadas de derechos de voto si éstos suponen una cortapisa para su emisión. Blesa indicó, de esta forma, que 'es imposible que se diga que son un instrumento para privatizar las cajas'. En su opinión, ahora 'puede ser un buen momento' para solucionar el problema de elevar el nivel de recursos propios y la solvencia de las cajas, 'con el mayor consenso político posible', comentó.

El beneficio neto atribuido de Caja Madrid ascendió en 2001 hasta 486,4 millones de euros (80.930 millones de pesetas), un 11,4% más que en 2001. Este crecimiento será el que tenga la entidad en 2002, según Blesa, aunque no explicó cómo lo conseguirá, ya que espera un ejercicio con menores márgenes e inferiores crecimientos de los créditos y los depósitos.

El presidente de la caja destacó que los resultados de 2001 están basados en la 'fortaleza del negocio bancario tradicional y en la orientación de la actividad a segmentos más rentables'. Caja Madrid creció menos que el año pasado en créditos, lo que le permitió realizar un 21% menos de dotaciones. La banca de negocios, una de las apuestas más fuertes de la entidad, ya representa el 48% del balance y proporciona el 18% del beneficio. Blesa desmintió los rumores que le sitúan en la presidencia de Telefónica o Iberia. También indicó que la caja dedicará más de 60,10 millones de euros (10.000 millones de pesetas) a diversas actividades para conmemorar el tercer centenario de Caja Madrid.

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