Cerrado el bar que impidió la entrada al ecuatoriano que murió ahogado en Barcelona

La empresa Odissea 2000, que explota el centro de ocio Maremàgnum de Barcelona, anunció ayer que rescindirá el contrato del bar nocturno Caipirinha, frente al cual se iniciaron los incidentes de la madrugada del domingo que causaron la muerte del ecuatoriano Wilson Pacheco, de 26 años. La juez ha acusado a dos vigilantes de seguridad y un portero del complejo lúdico de propinar una paliza a Pacheco y arrojarlo al agua tras impedirle la entrada al bar.

Odissea 2000 recrimina al establecimiento una 'absoluta falta de control sobre la imagen y la cualificación profesional del personal a su...

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La empresa Odissea 2000, que explota el centro de ocio Maremàgnum de Barcelona, anunció ayer que rescindirá el contrato del bar nocturno Caipirinha, frente al cual se iniciaron los incidentes de la madrugada del domingo que causaron la muerte del ecuatoriano Wilson Pacheco, de 26 años. La juez ha acusado a dos vigilantes de seguridad y un portero del complejo lúdico de propinar una paliza a Pacheco y arrojarlo al agua tras impedirle la entrada al bar.

Odissea 2000 recrimina al establecimiento una 'absoluta falta de control sobre la imagen y la cualificación profesional del personal a su servicio' para justificar la rescisión del contrato. En los dos últimos años el Ayuntamiento de Barcelona ha abierto 13 expedientes contra el establecimiento por sucesivos incumplimientos de la normativa sobre el derecho de admisión.

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A pesar de la reincidencia, el consistorio aplicó siempre la multa más leve de las previstas por la ley catalana de espectáculos y actividades recreativas: castigó al establecimiento con una multa de 100.000 pesetas, cuando la ley permite multas de hasta un millón y el cierre del local durante seis meses.

El bar Caipirinha, no obstante, no es el único local del centro Maremàgnum expedientado por no respetar las condiciones del derecho de admisión que garantiza la ley. En los dos últimos años, el ayuntamiento ha abierto un total de 40 expedientes sancionadores contra centros de ocio nocturno de Maremàgnum por este motivo y, en caso de sanción, todos se han cerrado también con la sanción más baja.

De los ocho establecimientos nocturnos acreditados como tal en el recinto, únicamente uno -Irish Winds- no fue objeto de ningún expediente sancionador por asuntos relacionados con el derecho de admisión en 2001, según datos del consistorio. Las discotecas Fiesta y Nayandei han acumulado diez y ocho expedientes, respectivamente, en dos años.

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