Manacor estrena un sistema mixto de liga y copa
El Campeonato de España individual ha ganado en seriedad. El tradicional torneo abierto y masivo ya no es concluyente, sino clasificatorio para el año siguiente. El título se decide ahora entre sólo doce jugadores, divididos en dos grupos. Miguel Illescas es el favorito en la edición que comienza hoy en la Cala Mandía de Manacor (Mallorca), pero se enfrenta a una oposición de alto nivel.
El esfuerzo realizado por las federaciones Española y Balear para un estreno brillante choca con las ausencias de las dos estrellas: Alexéi Shírov y Francisco Vallejo no pueden jugar porque la clausura ...
El Campeonato de España individual ha ganado en seriedad. El tradicional torneo abierto y masivo ya no es concluyente, sino clasificatorio para el año siguiente. El título se decide ahora entre sólo doce jugadores, divididos en dos grupos. Miguel Illescas es el favorito en la edición que comienza hoy en la Cala Mandía de Manacor (Mallorca), pero se enfrenta a una oposición de alto nivel.
El esfuerzo realizado por las federaciones Española y Balear para un estreno brillante choca con las ausencias de las dos estrellas: Alexéi Shírov y Francisco Vallejo no pueden jugar porque la clausura en Cala Mandía (el día 25) coincidirá con la inauguración del Campeonato del Mundo en Moscú. Sin embargo, la nueva fórmula y la calidad de los doce participantes auguran una competición de gran interés.
Illescas acaba de firmar una buena actuación en el Europeo de León, con cinco puntos en ocho partidas. Ahora se enfrenta a dos de sus compañeros de selección, Pablo San Segundo y Marc Narciso, y a cuatro de los integrantes de España B, cuyo alto rendimiento fue una de las notas destacadas en León: Javier Moreno, Julen Arizmendi, Gabriel del Río y Josep Manuel López; éste ocupa la plaza que correspondía al vigente campeón, Ángel Martín. Los cinco jugadores que completan la nómina han disputado Olimpiadas de ajedrez con la selección española: Mario Gómez, Lluis Comas, David García, Sergio Cacho y Zenón Franco.
Los seis componentes de cada grupo, de fuerza similar, se enfrentarán por el sistema de liga a una vuelta. Los dos primeros clasificados de cada uno se cruzarán en aspa a dos partidas en las semifinales. Los eventuales desempates en puestos clasificatorios se resolverán con partidas rápidas. El ritmo de juego será el clásico, en sesiones de seis horas como máximo, con 120 minutos para los primeros 40 movimientos, a pesar de que la Federación Internacional trata de imponer otro mucho más rápido.
Simultáneamente, y en la misma sede, se disputará el torneo abierto (a nueve rondas), cuyos cuatro primeros clasificados -así como los cuatro primeros del torneo cerrado- tendrán derecho a disputar el Campeonato de España de 2002. Los inscritos son casi un centenar.