OPINIÓN DEL LECTOR

Metro de Madrid: el orgullo de la capital

Si se pudiese resumir en una palabra la grandeza de la obra de reestructuración y ampliación de las líneas del metro de Madrid, esa palabra sería futuro. Nunca hubiéramos podido imaginar que a la hora de estudiar la forma más vanguardista y funcional de edificar nuestros medios de transporte público se consideraran la últimas tendencias, por ejemplo, en el campo de investigación científica aplicada a la medicina. Pero así es. Ahora resulta que se abre el camino a un futuro en el que, gracias a nuevas tecnologías como clonación o utilización de células estaminales, se podrá llegar a la c...

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Si se pudiese resumir en una palabra la grandeza de la obra de reestructuración y ampliación de las líneas del metro de Madrid, esa palabra sería futuro. Nunca hubiéramos podido imaginar que a la hora de estudiar la forma más vanguardista y funcional de edificar nuestros medios de transporte público se consideraran la últimas tendencias, por ejemplo, en el campo de investigación científica aplicada a la medicina. Pero así es. Ahora resulta que se abre el camino a un futuro en el que, gracias a nuevas tecnologías como clonación o utilización de células estaminales, se podrá llegar a la curación de lesiones medulares. El metro de Madrid está totalmente preparado para un futuro en el que ninguna persona tendrá que recurrir a las sillas de ruedas, y se ha puesto perfectamente al día evitando invertir una sola peseta (o centésimo de euro) en la reestructuración de las entradas no accesibles, preparándose así prontamente a un futuro próximo de obsolescencia de las mismas.

Así que los millones de millones de millones de pesetas (léase millones de millones de euros) están ya direccionados hacia fascinantes servicios como pantallas gigantes en las estaciones con vídeos entretenidos, decorados costosísimos e impresionantes, trayectos inimaginables y más y más ideas de sueño. Y los de las sillas de ruedas, pues... ya veréis cuando un día podréis volver a andar... ¡qué ilusión!

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