Dos universidades investigan cuántos profesores violan la dedicación exclusiva

La Universidad Complutense y la Rey Juan Carlos investigan cuántos docentes están vulnerando el contrato de dedicación exclusiva y cobran por impartir docencia en otros centros. Esta decisión se produce después de que la cadena SER revelase que al menos tres profesores de ambas universidades, dos de la Complutense y uno de la Rey Juan Carlos, compaginan sus clases en la universidad con otras en el Cardenal Cisneros, un centro adscrito a la Complutense.

Se trata de María Ángeles Rubia Villar, profesora de Filosofía del Derecho y esposa de José Iturmendi Morales, decano de la Facultad de ...

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La Universidad Complutense y la Rey Juan Carlos investigan cuántos docentes están vulnerando el contrato de dedicación exclusiva y cobran por impartir docencia en otros centros. Esta decisión se produce después de que la cadena SER revelase que al menos tres profesores de ambas universidades, dos de la Complutense y uno de la Rey Juan Carlos, compaginan sus clases en la universidad con otras en el Cardenal Cisneros, un centro adscrito a la Complutense.

Se trata de María Ángeles Rubia Villar, profesora de Filosofía del Derecho y esposa de José Iturmendi Morales, decano de la Facultad de Derecho; Luis Cosculluela, catedrático de Derecho Administrativo; y Manuel Quintanar, actualmente en comisión de servicios en la Rey Juan Carlos y jefe del servicio de la inspección hasta el pasado 1 de septiembre.

La Complutense ha solicitado a sus nueve centros adscritos (privados, pero en los que el alumno recibe un título de esta universidad) una relación de las personas que imparten clases para determinar el número de docentes que pueden estar incurriendo en irregularidades, según fuentes de la universidad.

La Rey Juan Carlos ha optado por enviar una carta a todos los profesores que tienen dedicación exclusiva recordándoles que su sueldo público no es compatible con otro privado, según explicó Ángel Gil, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado. Éste asegura que 'el estatuto del profesorado de 1984 establece taxativamente que un docente con dedicación exclusiva no puede desempeñar otra actividad, salvo 75 horas al año para dar charlas o conferencias'.

'La mayoría de los funcionarios no se arriesgan a cometer una tontería de estas características; por eso creo que afecta a una minoría de los docentes', dijo Gil, que recordó que los profesores con hacen una declaración jurada en su contrato por la que se comprometen a no realizar otra actividad remunerada. También dijo que la legalidad incluye sanciones: desde cambiarles el contrato a tiempo parcial hasta la apertura de un expediente sancionador.

El PSOE pide explicaciones

La oposición en la Asamblea exigió ayer al Gobierno regional que dé explicaciones. 'Hemos pedido la comparecencia del consejero de Educación, Carlos Mayor Oreja, para que explique por qué no funcionan los servicios de inspección que tiene en la universidad', declara María Dolores Rodríguez Gabucio, quien se mostró dispuesta a pedir la comparecencia de ambos rectores.

El grupo parlamentario de IU se sumó a esta petición. 'En este asunto no vale sólo con el arrepentimiento de los profesores que hayan incumplido su obligación de dedicación exclusiva, sino que exigiremos que se les abra expediente académico y que se les haga devolver el dinero obtenido por su actividad en la universidad', manifestó a Efe Franco González, portavoz de Izquierda Unida en la Asamblea.

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