FOTOGRAFIARSE DESNUDO, MODA CHILENA
Un singular estudio fotográfico funciona desde hace unos meses en Santiago de Chile. Se llama De Cuerpo y Alma y su particularidad es retratar a sus clientes desnudos, según manifestó al diario La Tercera de Santiago la actriz Liliana Ross, gestora de la iniciativa. 'Todos quieren sacarse una foto desnudos', afirma Ross, quien, además de destapar una faceta hasta ahora desconocida de sus compatriotas, ha sacado adelante este floreciente negocio. 'No hay cuerpos feos' es la premisa de las responsables del estudio, en el que para cumplir la 'fantasía' de retratarse de esa forma cad...
Un singular estudio fotográfico funciona desde hace unos meses en Santiago de Chile. Se llama De Cuerpo y Alma y su particularidad es retratar a sus clientes desnudos, según manifestó al diario La Tercera de Santiago la actriz Liliana Ross, gestora de la iniciativa. 'Todos quieren sacarse una foto desnudos', afirma Ross, quien, además de destapar una faceta hasta ahora desconocida de sus compatriotas, ha sacado adelante este floreciente negocio. 'No hay cuerpos feos' es la premisa de las responsables del estudio, en el que para cumplir la 'fantasía' de retratarse de esa forma cada cliente debe pagar 150.000 pesos (unas 40.000 pesetas), un precio bastante alto en un país en el que el salario mínimo equivale a dos tercios de esa suma. '¿Quién no ha tenido esa fantasía alguna vez?', dijo la actriz, que comparte la iniciativa con su hija, Daniela Miller, y la fotógrafa Pía Cosmelli. 'Aquí se han desnudado señores de 70 años, vendedoras de tienda, embarazadas con marido y sin marido, uno que otro actor, niños, ejecutivos, esposas de empresarios, gordos y flacos', destacó la actriz. 'Los que vienen son personas normales, que ves en la calle; no son Claudia Schiffer ni mucho menos', señala por su parte Pía Cosmelli. Añadió que se trata de gente 'con defectos y virtudes, que cuando las maquillamos para la foto sacan cosas que en otras circunstancias no se habrían atrevido. Quedan más lindas de lo que pensaban, se atreven a realizar su fantasía y se van felices'.-