OPINIÓN DEL LECTOR

La nueva atracción de Torremolinos

Dentro de muy poco, nuestro culto, elegante y original alcalde del PP, Pedro Fernández Montes, después de muchas penalidades y aplazamientos, va a conseguir ampliar su cementerio, no ya con un tanatorio (porque eso lo haría cualquiera) sino una auténtica 'casa de Sinué el Egipcio'. La pequeña necrópolis (con cinco nichos libres) de la bajada a la playa y en el mismísimo centro del casco de la población, va a ser habilitada para que las 440 defunciones anuales de Torremolinos sean atendidas como Dios manda (según él) con respecto a los velatorios del difunto.

Decimos que es la 'casa de S...

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Dentro de muy poco, nuestro culto, elegante y original alcalde del PP, Pedro Fernández Montes, después de muchas penalidades y aplazamientos, va a conseguir ampliar su cementerio, no ya con un tanatorio (porque eso lo haría cualquiera) sino una auténtica 'casa de Sinué el Egipcio'. La pequeña necrópolis (con cinco nichos libres) de la bajada a la playa y en el mismísimo centro del casco de la población, va a ser habilitada para que las 440 defunciones anuales de Torremolinos sean atendidas como Dios manda (según él) con respecto a los velatorios del difunto.

Decimos que es la 'casa de Sinué el Egipcio' porque para cualquier hijo de vecino, un tanatorio es una sala con una pequeña superficie acristalada y refrigerada para la conservación y exposición del difunto, unos servicios sanitarios para los familiares y acompañantes, y un salón más o menos acondicionado para velar el cadáver hasta su enterramiento. Hemos dicho que esto sería lo normal, pero estamos hablando de una de las múltiples obras de Tutankamontes (como han bautizado en la prensa local al alcalde)...

Por tanto, ese austero tanatorio descrito por nosotros sería una ofensa para un alcalde que está intentando meter columnas neoclásicas al edificio posrracionalista del Ayuntamiento desde que entró, que a una caseta de feria con portada de la ermita del Rocío le puso el pomposo nombre de Auditorio Príncipe Felipe y que, recientemente, en un alarde de ecología y buen gusto, se ha llevado por delante todos los árboles (alguno centenario) de la plaza y ha colocado esas tres fuentes prefabricadas de 'puticlub' (en arte llamadas kitsch, en alemán: cursilería o basura) dignas de ser llevadas a una mesa redonda sobre arte y decoración.

El número de líneas máximas de esta carta nos impide desvelar tan original tanatorio, viéndonos en la obligación de escribir una segunda carta, y rogando su publicación en días posteriores con la cabecera de: Torremolinos y la casa de Sinué el Egipcio (segunda parte).

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