Ocio gratuito para el fin de semana

Concierto de cantautores, talleres de magia, proyección de películas y un rato navegando en Internet. Si se suman todos estos planes para el fin de semana, el presupuesto de más de uno se dispararía, pero la Calle de la Cultura (paseo de Verano del parque Juan Carlos I) ofrece esto, y mucho más, por la cantidad de cero pesetas. 'Queremos que el ciudadano participe, gratis, del proceso creativo de todas las disciplinas culturales', explicó ayer Manuel Álvarez. Álvarez es el presidente de la Fundación Progreso y Cultura del sindicato UGT de Madrid, organizadora de la Calle de la Cultura, evento ...

Concierto de cantautores, talleres de magia, proyección de películas y un rato navegando en Internet. Si se suman todos estos planes para el fin de semana, el presupuesto de más de uno se dispararía, pero la Calle de la Cultura (paseo de Verano del parque Juan Carlos I) ofrece esto, y mucho más, por la cantidad de cero pesetas. 'Queremos que el ciudadano participe, gratis, del proceso creativo de todas las disciplinas culturales', explicó ayer Manuel Álvarez. Álvarez es el presidente de la Fundación Progreso y Cultura del sindicato UGT de Madrid, organizadora de la Calle de la Cultura, evento que cuenta con el patrocinio de la Comunidad y del Ayuntamiento de Madrid.

En esta calle, que cierra esta noche después de un concierto (21.00) de José Antonio Labordeta, Luis Pastor e Inma Serrano en el auditorio del parque Juan Carlos I, hay ocho carpas, divididas por temas: cómic, nuevas tecnologías, cine, artes plásticas y ONG, entre otros. En la carpa de nuevas tecnologías, los niños se amontonan alrededor de las pantallas de Internet. En un juego, una bruja virtual enseña a hacer batidos. Cerca de esta carpa está la de artes plásticas, donde otros niños han colgado sus dibujos en las paredes: desde retratos de personajes de Los Simpson hasta ilustraciones de fantasmas.

Mientras, los mayores se entretienen con los puestos de artesanía, los productos de comercio justo que venden las ONG o las máquinas de refrescos, las únicas que permanecerán mañana cuando desaparezca la Calle de la Cultura y los patinadores y ciclistas vuelvan a tomar el paseo de Verano.