Derribadas ocho chabolas de 40 inmigrantes en El Ejido

La asociación Almería Acoge ha denunciado públicamente el derribo de ocho chabolas, realizadas con plásticos de invernaderos, que servían de vivienda a unos 40 inmigrantes, en el paraje conocido como Tierras de Almería, en el término municipal de El Ejido (Almería). Aunque el derribo tuvo lugar el 3 de septiembre, el hecho no se ha conocido hasta ahora, cuando algunos de los inmigrantes de ese asentamiento lo han puesto en conocimiento de los colaboradores de Almería Acoge que trabajan en El Ejido, ayuntamiento dirigido por el popular Juan Enciso.

La asociación conocía bien las chabolas...

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La asociación Almería Acoge ha denunciado públicamente el derribo de ocho chabolas, realizadas con plásticos de invernaderos, que servían de vivienda a unos 40 inmigrantes, en el paraje conocido como Tierras de Almería, en el término municipal de El Ejido (Almería). Aunque el derribo tuvo lugar el 3 de septiembre, el hecho no se ha conocido hasta ahora, cuando algunos de los inmigrantes de ese asentamiento lo han puesto en conocimiento de los colaboradores de Almería Acoge que trabajan en El Ejido, ayuntamiento dirigido por el popular Juan Enciso.

La asociación conocía bien las chabolas derribadas y a sus moradores, ya que visitaban con periodicidad el lugar para ofrecer ayuda a los inmigrantes, principalmente información en sus demandas de permisos de residencia y trabajo.

Según el relato realizado por los propios inmigrantes, el pasado día 3, hacia el mediodía, se presentaron en el asentamiento de chabolas dos policías más un operario con una máquina excavadora. Los agentes empezaron a pedir a los inmigrantes sus nombres y sus pasaportes. Poco después y sin ofrecer ninguna explicación, según los inmigrantes, la máquina comenzó a destruir las chabolas que desde hacía aproximadamente un año servían de refugio a los 40 extranjeros.

La destrucción de sus infraviviendas y la falta de alternativas para acceder a un realojo obligó a muchos de los inmigrantes a actuar igual que lo han hecho otros compañeros afectados por anteriores derribos. Mientras unos buscaron acomodo en cortijos en los que viven algunos amigos, otros no tuvieron más remedio que quedarse a dormir en la calle, en el mismo lugar donde hasta entonces habían estado las chabolas que habían levantado.

El director de Almería Acoge, Juan Miralles, ha criticado duramente el derribo y asegura no entender 'a qué política responde este tipo de actuaciones'. Igualmente, Miralles se pregunta 'en qué ha mejorado la situación de vida de estos trabajadores y las necesidades de sus empleadores' y denuncia el escaso interés que se presta a estas personas 'fuera del horario y el momento en el que son requeridos para que aporten sus brazos para seguir construyendo el llamado milagro almeriense'.

La falta de viviendas dignas para trabajadores inmigrantes es uno de los principales problemas de la provincia almeriense y, desde Almería Acoge, advierten que actuaciones como el derribo de chabolas sin alternativa de realojo agravan la situación y no facilitan el camino para alcanzar la integración y la convivencia.

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