La A-7 registra colas de hasta 27 kilómetros en dirección Tarragona

La primera jornada de la 'operación salida' terminó sin accidentes

Los atascos se empezaron a producir a primera hora de la mañana, se agudizaron poco antes de mediodía e iniciaron su disolución casi espontánea a partir de la hora de comer. Todo como estaba previsto. Y como también había vaticinado el Servicio Catalán de Tráfico, los peajes se llenaron y produjeron larguísimas colas que exacerbaron los nervios de quienes pagaban por estar parados oyendo la radio del coche o charlando con los acompañantes.

Las colas más notables se produjeron desde el peaje de Tarragona hasta Altafulla. Hasta 27 kilómetros de atasco se formaron en esta zona. De hecho, l...

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Los atascos se empezaron a producir a primera hora de la mañana, se agudizaron poco antes de mediodía e iniciaron su disolución casi espontánea a partir de la hora de comer. Todo como estaba previsto. Y como también había vaticinado el Servicio Catalán de Tráfico, los peajes se llenaron y produjeron larguísimas colas que exacerbaron los nervios de quienes pagaban por estar parados oyendo la radio del coche o charlando con los acompañantes.

Las colas más notables se produjeron desde el peaje de Tarragona hasta Altafulla. Hasta 27 kilómetros de atasco se formaron en esta zona. De hecho, la autopista A-7 tenía entre Martorell y Tarragona más tramos con atasco que libres. Pasado Martorell, la primera cola tenía unos 13 kilómetros de longitud y reaparecía más tarde, antes de El Vendrell (otros 17 kilómetros), para culminar antes de las cabinas de Tarragona (27 kilómetros).

En dirección norte, la cola era mucho menor: unos tres kilómetros en el peaje de Tarragona y apenas dos kilómetros frente a las cabinas de La Roca.

En Figueres también se registraron retenciones de entre dos y cuatro kilómetros, tanto en la autopista como en la carretera nacional II. Esta carretera fue una de las pocas en las que el tráfico siguió siendo muy denso por la tarde. Hacia las seis de la tarde, las colas en dirección a Francia alcanzaban los ocho kilómetros.

En las vías del interior las colas fueron mucho más largas. La C-260 registró a partir de Figueres y en dirección a Roses colas de hasta 15 kilómetros, y en la C-35 hubo también retenciones de varios kilómetros, igual que en las carreteras que van hacia Blanes, la GI-512 y la GI-682.

El Servicio Catalán de Tráfico cree que las retenciones volverán a ser importantes esta tarde y noche, así como el martes y el miércoles, y el próximo fin de semana.

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Durante el día de ayer se aplicaron restricciones de tráfico a los camiones.

Colas en la autopista A-7, ayer a mediodía.VICENS GIMÉNEZ

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