El confesor de la mujer de Kohl vincula su suicidio a los problemas del ex canciller
Monseñor Erich Ramstetter, confesor de la esposa del ex canciller alemán Helmut Kohl, considera que la alergia a la luz que ésta sufría y que terminó llevándola al suicidio era psicosomática y en parte producida por el escándalo en el que se vio envuelto su marido por las cuentas secretas de la Unión Cristianodemócrata (CDU). 'La psique de cada persona sólo soporta un cierto grado de presión. Su alma se enfermó con el escándalo de las cuentas ocultas en el que llegaron a hacer ataques que dañaban el honor', dice Ramstetter en declaraciones que publica hoy el diario Bild. 'Era una enferm...
Monseñor Erich Ramstetter, confesor de la esposa del ex canciller alemán Helmut Kohl, considera que la alergia a la luz que ésta sufría y que terminó llevándola al suicidio era psicosomática y en parte producida por el escándalo en el que se vio envuelto su marido por las cuentas secretas de la Unión Cristianodemócrata (CDU). 'La psique de cada persona sólo soporta un cierto grado de presión. Su alma se enfermó con el escándalo de las cuentas ocultas en el que llegaron a hacer ataques que dañaban el honor', dice Ramstetter en declaraciones que publica hoy el diario Bild. 'Era una enfermedad psicosomática, una enfermedad del alma. Por eso no considero su muerte como un suicidio en el sentido de la teología moral', agrega el sacerdote.
Hannelore Kohl fue encontrada muerta en su casa de Oggersheim (suroeste de Alemania) el jueves pasado después de que se quitara la vida. Según la oficina del ex canciller, la señora Kohl dejó cartas de despedida para su marido y sus dos hijos, Walter y Peter, en las que explicaba que había decidido quitarse la vida porque había perdido las esperanzas de curación.
La alergia que padecía le impedía a Hannelore salir de su casa y la obligaba a permanecer siempre en espacios oscuros. Por otra parte, el último año y medio no había sido fácil para el matrimonio Kohl, después de que se descubriera que durante los 25 años en el que el ex canciller estuvo al frente de la CDU, el partido había mantenido una contabilidad paralela. El propio Kohl reconoció haber recibido donaciones ilegales y anónimas a comienzos de los noventa, lo que causó una crisis en la CDU y obligó al ex canciller a renunciar a su cargo de presidente honorario.
El suicidio de Hannelore ha conmovido a toda Alemania y hay psiquiatras que temen que su decisión encuentre imitadores.