La guerrilla colombiana secuestra al coordinador de la Copa América

Las autoridades creen que la captura de Hernán Mejía es 'ocasional'

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) son las autoras del secuestro, el lunes pasado, de Hernán Mejía, vicepresidente de la Federación nacional de fútbol y coordinador de la Copa América, según confirmaron anoche fuentes miliares. En principio, el Gobierno considera el hecho como algo 'ocasional', con 'fines de extorsión económica', y descarta que tenga algo que ver con ese torneo, que se va a disputar en el país en julio. En ese sentido, el presidente, Andrés Pastrana, recordó que la guerrilla y los paramilitares se han comprometido a respetarlo. A su vez, el ministro de ...

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Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) son las autoras del secuestro, el lunes pasado, de Hernán Mejía, vicepresidente de la Federación nacional de fútbol y coordinador de la Copa América, según confirmaron anoche fuentes miliares. En principio, el Gobierno considera el hecho como algo 'ocasional', con 'fines de extorsión económica', y descarta que tenga algo que ver con ese torneo, que se va a disputar en el país en julio. En ese sentido, el presidente, Andrés Pastrana, recordó que la guerrilla y los paramilitares se han comprometido a respetarlo. A su vez, el ministro de Defensa, Gustavo Bell, pidió al ejército perseguir por las montañas, entre las provincias de Risaralda y Chocó, a los hombres armados que hicieron cautivo al dirigente deportivo.

La captura de Mejía, cuando regresaba de su fincha de Chocó a Pereira, la capital de Risaralda, hizo renacer los temores respecto a la Copa América. Cuatro atentados terroristas, en mayo, hicieron pensar en la posibilidad de un cambio de sede del torneo, el más antiguo e importante del continente, que finalmente no se produjo. Algunos deportistas, entre ellos el portero local Córdoba, aseguran que Colombia, por la situación de violencia que sufre, no puede garantizar la seguridad en un campeonato con 12 selecciones.

Álvaro Fina, el presidente de la Federación colombiana, espera que las FARC cumplan su palabra: uno de sus comandantes, Rául Reyes, se comprometió a no sabotear la celebración de la Copa América.

Ayer también se descartó que una carta enviada al presidente de la Federación argentina, repleta de incoherencias y amenazas y en la que se le presiona para que su equipo no asista, tenga validez alguna.

Hace pocos días, en Bogotá, se hizo una demostración de lo que será el operativo de seguridad que rodeará a la bautizada como Copa de la Paz. Incluye escoltas para los dirigentes, los árbitros y las selecciones, así como equipos de inteligencia electrónica en todos los estadios y agentes encubiertos. Sólo en la capital, donde se jugarán los partidos decisivos, habrá 2.500 policías movilizados. Y en todo el país, con siete subsedes, serán unos 20.000.

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