OPINIÓN DEL LECTOR

Predicar con el ejemplo

Somos miles de ciudadanos y ciudadanas que desde hace muchos años venimos respondiendo a las convocatorias que se nos hacen en éste sentido desde Gesto por la Paz. Recientemente estas convocatorias se han multiplicado, con la incorporación a estas actividades de otros agentes sociales (movimientos, plataformas, asociaciones, partidos políticos), e incluso, de las instituciones públicas, perfectamente legitimados todos para hacerlo, pero que sus convocatorias y el desarrollo de los actos convocados no dan, precisamente, el mensaje de unidad que se pide a la sociedad en estos casos, y por tanto,...

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Somos miles de ciudadanos y ciudadanas que desde hace muchos años venimos respondiendo a las convocatorias que se nos hacen en éste sentido desde Gesto por la Paz. Recientemente estas convocatorias se han multiplicado, con la incorporación a estas actividades de otros agentes sociales (movimientos, plataformas, asociaciones, partidos políticos), e incluso, de las instituciones públicas, perfectamente legitimados todos para hacerlo, pero que sus convocatorias y el desarrollo de los actos convocados no dan, precisamente, el mensaje de unidad que se pide a la sociedad en estos casos, y por tanto, no están predicando con el ejemplo.

Es lamentable ver cómo los convocantes se pelean por el lema de la manifestación, por el orden en que se colocan tras la pancarta, por el lugar donde se colocan después de las manifestaciones o en las concentraciones, e incluso, como ha ocurrido en las concentraciones frente a los ayuntamientos con motivo del asesinato del señor Giménez Abad, por la duración de las mismas, que según unos tenían que durar cinco minutos, tal y como lo había pedido la Federación Española de Municipios, y según otros la duración tenía que ser de quince minutos, como lo había propuesto el Lehendakari, Juan José Ibarretxe.

Estos comportamientos son lamentables y los participantes en los actos de condena del terrorismo y de defensa de los derechos humanos, nos merecemos que los convocantes prediquen con el ejemplo, y actúen de forma unitaria, como quieren que actuemos los ciudadanos y ciudadanas de este país.

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