Eximios veteranos

Éstas fueron dos buenas actuaciones de dos artistas fuertemente enraizados con la capital de España, para dar color a las fiestas de San Isidro. Abrió Nacho García Vega, ex Nacha Pop y eterno practicante de un pop hedonista y positivo, lejos de las modas y francamente digno en sus postulados. Presentaba su segundo disco en solitario, Salto al vacío, pero también ofreció canciones de Nacha Pop y Rico, las dos aventuras legendarias por las que es querido y recordado. Bien de voz y energía, Nacho espera su momento para recuperar el punto comercial que el paso del tiempo y las modas le esca...

Éstas fueron dos buenas actuaciones de dos artistas fuertemente enraizados con la capital de España, para dar color a las fiestas de San Isidro. Abrió Nacho García Vega, ex Nacha Pop y eterno practicante de un pop hedonista y positivo, lejos de las modas y francamente digno en sus postulados. Presentaba su segundo disco en solitario, Salto al vacío, pero también ofreció canciones de Nacha Pop y Rico, las dos aventuras legendarias por las que es querido y recordado. Bien de voz y energía, Nacho espera su momento para recuperar el punto comercial que el paso del tiempo y las modas le escamotean. Con canciones como Veo luz, Subidón o Bárbara sólo es cuestión de aguardar. Cerró el hispano-argentino Ariel Rot, quien hizo bueno el título de su reciente último disco, En vivo mucho mejor. La sapiencia guitarrera, la emoción vocal y el acompañamiento de una extraordinaria banda hizo gozar a un público deseoso de temas de rock en caliente, donde la comunicación es básica y el amor por las canciones bien hechas nota dominante. Ariel tiene muchas: El vals de los recuerdos, Dos de corazones, Vicios caros o Baile de ilusiones, entre las más recientes. Pero también La milonga del marinero y el capitán o Mucho mejor, de su etapa en Los Rodríguez, o Quiero besarte, de los inmortales Tequila. Una noche francamente agradable en compañía de dos eximios veteranos.