El homicida tocaba la batería en un conjunto que actuaba en los pueblos

Adalberto Gutiérrez era una persona conocida en el madrileño barrio de Carabanchel, sobre todo porque su consulta de podología estaba abierta desde hace 15 años en el Camino Viejo de Leganés.

Para algunos de los vecinos del inmueble donde vivía era una persona normal; para otros, una persona que había maltratado a su esposa, María del Carmen, e incluso la había mantenido encerrada durante dos semanas.

El matrimonio, sin hijos, no pasaba por sus mejores momentos y María del Carmen se había marchado a Uruguay hace dos meses para visitar a sus padres, enfermos. 'Para escapar de él',...

Adalberto Gutiérrez era una persona conocida en el madrileño barrio de Carabanchel, sobre todo porque su consulta de podología estaba abierta desde hace 15 años en el Camino Viejo de Leganés.

Para algunos de los vecinos del inmueble donde vivía era una persona normal; para otros, una persona que había maltratado a su esposa, María del Carmen, e incluso la había mantenido encerrada durante dos semanas.

El matrimonio, sin hijos, no pasaba por sus mejores momentos y María del Carmen se había marchado a Uruguay hace dos meses para visitar a sus padres, enfermos. 'Para escapar de él', dice entristecida una buena amiga de la fallecida María Antonia Cuesta. Entre sollozos añade: 'A Adalberto se le veían las intenciones; así que Toñi hasta dejó hoy una ventana abierta porque temía lo que pasaría cuando le dijera que iba a abandonar el negocio, pero nunca llegamos a pensar que podría reaccionar de esta manera'.

Adalberto, nacido hace 54 años en Montevideo (Uruguay), tocaba la batería en el grupo Tools, un conjunto que amenizaba las fiestas de los pueblos. Solía ensayar en la casa, donde tenía también la consulta podológica.