Tecnología, ciencias y ánimos a la selección
El impulso a la Investigación y el Desarrollo fue una de las claves del inicio de la presente legislatura. Los planes nacional y valenciano de I+D todavía no se han presentado oficialmente, pero José María Aznar quiso expresar su apoyo a la tecnología en la primera cita de su apretada jornada en tierras valencianas.
Rodeado de una nube de fotógrafos y escoltas, pero impasible el ademán, Aznar acudió a media mañana a las instalaciones del Instituto de la Investigación del Mueble (Aidima) en el parque tecnológico de Paterna.
El presidente comprobó el funcionamiento de los artilugio...
El impulso a la Investigación y el Desarrollo fue una de las claves del inicio de la presente legislatura. Los planes nacional y valenciano de I+D todavía no se han presentado oficialmente, pero José María Aznar quiso expresar su apoyo a la tecnología en la primera cita de su apretada jornada en tierras valencianas.
Rodeado de una nube de fotógrafos y escoltas, pero impasible el ademán, Aznar acudió a media mañana a las instalaciones del Instituto de la Investigación del Mueble (Aidima) en el parque tecnológico de Paterna.
El presidente comprobó el funcionamiento de los artilugios capaces de abrir y cerrar un cajón miles de veces o los pistones que comprueban la resistencia de un taburete.
La comitiva se trasladó a continuación al Museo de las Ciencias. El público, en su mayoría infantil, que visitaba el museo a mediodía, se vio sorprendido por el impresionante aparato de seguridad y cámaras que rodea al presidente del Gobierno.
Algún tímido aplauso surgió entre el respetable mientras Aznar seguía las evoluciones del Péndulo de Foucault atento a las explicaciones de Manuel Toharia, director del museo.
El plato fuerte, la comida, tuvo como escenario la última planta del impresionante edificio del Museo de las Ciencias. Los miembros de la selección española de fútbol, concentrados en El Saler, compartieron mantel con el presidente. Aznar, según confesó en Catarroja, les infudió ánimos para su próximo compromiso ante la selección francesa, campeona del mundo.
A Aznar le costó invitar a Eduardo Zaplana a compartir la foto con los futbolistas. Cuando lo hizo, le invitó a ponerse en cuclillas, en la fila inferior. Pero Zaplana, un punto estirado, desoyó la sugerencia y mantuvo la altura.