El mal tiempo obligó a cerrar las pistas de esquí y al uso de cadenas en los puertos de montaña
El teléfono de emergencias 112 recibió, entre las nueve de la mañana y las siete de la tarde, más de 100 llamadas de socorro por culpa del viento, de los que unos 25 correspondían a la capital, según informó un portavoz de este servicio. Los bomberos de la Comunidad tuvieron sus principales dificultades en la zona de la sierra y en la periferia oeste de la capital. Casi todos los avisos se centraron en los municipios de Colmenar Viejo, Collado Villalba, Majadahonda, Las Rozas y El Escorial.
El mayor número de llamadas tuvo que ver con caídas de árboles o de ramas, cornisas, antenas y ca...
El teléfono de emergencias 112 recibió, entre las nueve de la mañana y las siete de la tarde, más de 100 llamadas de socorro por culpa del viento, de los que unos 25 correspondían a la capital, según informó un portavoz de este servicio. Los bomberos de la Comunidad tuvieron sus principales dificultades en la zona de la sierra y en la periferia oeste de la capital. Casi todos los avisos se centraron en los municipios de Colmenar Viejo, Collado Villalba, Majadahonda, Las Rozas y El Escorial.
El mayor número de llamadas tuvo que ver con caídas de árboles o de ramas, cornisas, antenas y carteles publicitarios. En ninguna de las intervenciones se registraron heridos, según el portavoz de los bomberos de la Comunidad. Éstos efectuaron 130 salidas entre las nueve de la mañana y las siete de la tarde. En Las Rozas, un cartel luminoso cayó sobre un vehículo, sin causar heridos.
Los bomberos del Ayuntamiento de Madrid atendieron más de 100 salidas durante toda la jornada: un 40% más de lo registrado en un día normal. Igual que sus homólogos regionales, las cornisas y los árboles fueron los elementos callejeros que más problemas les causaron. Los avisos se repartieron por toda la ciudad, sin que hubiera una zona especialmente afectada por el vendaval.
El mal tiempo también obligó a cerrar los puertos de Navacerrada y Valdesquí. El fuerte temporal, acompañado de continuas rachas de viento, impidió que los esquiadores pudieran utilizar las pistas durante el fin de semana. En la alta montaña, la fuerza del viento llegó a superar los 70 kilómetros por hora, por lo que se decidió cerrar los remontes y evitar así cualquier posibilidad de que se produjeran accidentes.
A lo largo de la tarde se hizo obligatorio el uso de cadenas en las carreteras de acceso a los puertos de montaña de Navafría (M-637), La Morcuera (M-611), Cotos (M-604) y Navacerrada (M-601). La circulación en estos puntos fue densa, y los atascos se repitieron durante toda la jornada.
La Dirección General de Protección Civil del Ministerio del Interior había alertado al Gobierno regional de que se esperaban precipitaciones en forma de nieve por encima de los 1.000 metros, con un espesor que podría llegar a los 10 centímetros.
El Instituto Nacional de Meteorología prevé para hoy cielo poco nuboso, excepto en la sierra, donde habrá intervalos nubosos con posibilidad de precipitaciones débiles dispersas, que serán de nieve a partir de los 900 metros. Las temperaturas nocturnas experimentarán un ligero descenso, y las diurnas, un ligero ascenso, mientras que los vientos serán del noroeste moderados, con rachas fuertes durante la noche, y disminuirán a moderados por la tarde, informa Efe.