Caos

Son las 18.45 del día 5 de enero, tarde de Reyes. Antes de llegar a Madrid llamo a un amigo, que quería ver en su oficina de la calle de José Abascal, muy próxima a la Castellana. Me comunica que acceda por la Castellana, que en esos momentos ya se circula con fluidez. La cabalgata de los Reyes había empezado a las 17.45. Con algo de esfuerzo llego a Atocha, donde comienza una circulación lenta. Por fin llego al comienzo del paseo del Prado, donde observo con preocupación una barrera de policías y de coches que me impiden el paso.

Le pregunto a un guardia municipal que me aconseje un tr...

Son las 18.45 del día 5 de enero, tarde de Reyes. Antes de llegar a Madrid llamo a un amigo, que quería ver en su oficina de la calle de José Abascal, muy próxima a la Castellana. Me comunica que acceda por la Castellana, que en esos momentos ya se circula con fluidez. La cabalgata de los Reyes había empezado a las 17.45. Con algo de esfuerzo llego a Atocha, donde comienza una circulación lenta. Por fin llego al comienzo del paseo del Prado, donde observo con preocupación una barrera de policías y de coches que me impiden el paso.

Le pregunto a un guardia municipal que me aconseje un trayecto. Intento seguirlo hasta encontrarme con otra barrera, y así, de barrera a barrera y tiro porque me toca, estoy hasta las 20.15. Después de diferentes retrasos anulo la cita con mi amigo. Los automovilistas están más nerviosos que de costumbre, con un ruido de claxon ensordecedor. En resumen, un auténtico caos circulatorio. He podido comprobar la paciencia y las buenas disposiciones para servir a los ciudadanos por parte de los policías. Sin embargo, no hay una información fluida y actualizada, ya que en cada barrera los guardias me dicen trayectos y me avisan de calles cortadas, pero diferentes y que resultan imposibles, pues aparecen nuevas barreras. Intentan servir, pero confunden a los automovilistas haciéndoles dar vueltas y más vueltas, que despiertan sentimientos y palabras que no me atrevo a escribir.

¿Por qué no habrán puesto carteles indicadores avisando con antelación a cada barrera de los cortes de calles y la duración aproximada de los mismos? ¿Por qué no se habrá publicado esa información en los periódicos? ¿Por qué no se facilita y se coordina la información, a través de radio o móviles, a los policías de cada barrera para que no mareen a los ciudadanos? ¿Saben los responsables municipales de tráfico qué significa prestar un servicio que facilite la circulación? ¿Por qué se deja pasar las barreras a determinados ciudadanos 'conocidos'? ¿...?-