Tribuna:

Demasiado tarde

Los mercados de valores no han recibido bien el final del complicado proceso electoral estadounidense, debido a que en estos momentos el temor a un enfriamiento brusco de la economía de aquel país prima sobre cualquier otra opción.La Bolsa de Madrid perdió ayer el 1,69% presionada por un papel que, al parecer, no puede esperar, lo que lleva a muchos observadores a sospechar que proviene de los fondos de inversión. La cancelación de participaciones por parte de los inversores provoca ese constante goteo de papel que impide cualquier reacción positiva por parte del mercado, que bastante tiene co...

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Los mercados de valores no han recibido bien el final del complicado proceso electoral estadounidense, debido a que en estos momentos el temor a un enfriamiento brusco de la economía de aquel país prima sobre cualquier otra opción.La Bolsa de Madrid perdió ayer el 1,69% presionada por un papel que, al parecer, no puede esperar, lo que lleva a muchos observadores a sospechar que proviene de los fondos de inversión. La cancelación de participaciones por parte de los inversores provoca ese constante goteo de papel que impide cualquier reacción positiva por parte del mercado, que bastante tiene con absorberlo sin descensos significativos.

La publicación del IPC de noviembre, con un incremento que se sitúa en la parte alta de las predicciones, apenas tuvo incidencia alguna a pesar de las consecuencias económicas inmediatas para las cuentas del Estado. Los inversores ya se habían puesto en lo peor basándose en la trayectoria de ese indicador a lo largo del ejercicio, que ya suma una subida del 4,1%.

Tampoco se esperaban novedades por parte del BCE, que mantuvo el tipo de interés en el 4,75% ante las perspectivas de enfriamiento de la economía de la UE.

El resto de los mercados europeos siguió la tendencia impuesta por Wall Street, que llegaba a perder hasta 178 puntos poco después de la apertura, al tiempo que el mercado Nasdaq cedía el 2% a media sesión. Los menores beneficios empresariales y los numerosos despidos anunciados tenían la culpa.

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