De vergüenza

Desde hace dos años comenzaron las obras para hacer una calle de 250 metros aproximadamente en los terrenos del Canal de Isabel II en la plaza de Castilla, que serviría para solaz esparcimiento y paseo de los madrileños. A todo esto, con un presupuesto de varios cientos de millones. Pues bien, yo que vivo al lado de dicha obra le puedo decir que comenzaron hace dos años con una gran fila de tractores y camiones a sacar tierra y más tierra de un terreno que es completamente llano. Pasa un tiempo y vuelven los camiones a traer tierra de fuera para rellenar lo que habían quitado y lo vuelven a de...

Desde hace dos años comenzaron las obras para hacer una calle de 250 metros aproximadamente en los terrenos del Canal de Isabel II en la plaza de Castilla, que serviría para solaz esparcimiento y paseo de los madrileños. A todo esto, con un presupuesto de varios cientos de millones. Pues bien, yo que vivo al lado de dicha obra le puedo decir que comenzaron hace dos años con una gran fila de tractores y camiones a sacar tierra y más tierra de un terreno que es completamente llano. Pasa un tiempo y vuelven los camiones a traer tierra de fuera para rellenar lo que habían quitado y lo vuelven a dejar llano como estaba. A continuación comienzan a hacer zanjas para meter tuberías y las tapan; vuelven a hacer nuevas zanjas para meter tuberías y las tapan; vuelven a hacer nuevas zanjas para meter otras tuberías y las tapan; más tarde vuelven con nuevas zanjas, ahora sí para el riego, y las tapan, vuelven a hacer nuevas zanjas para los bordillos, los colocan y al rato los quitan de nuevo.Esto es de novela. Siguen haciendo zanjas y colocan un pasillo en medio de la calzada y plantan unos árboles que nunca regaron y algunos ya están secos. Vuelven a allanar la calle y colocan unos bancos casi en la mitad de la calzada, que está quedando de tierra y es un perfecto barrizal cuando llueve, por tanto queda horrorosa. Por otra parte, colocan césped, que ya está seco porque no lo riegan.

Señores míos, muchas más cosas les podía contar, pero para hacer una calzada de 250 metros, cientos de millones, más de dos años, la calle de tierra y aún sin inaugurar.

De verdadera vergüenza. Sólo hace falta darse una vuelta por las calles de Félix Boix y Joaquín Bau que limitan con esa zona para comprobar esta verdad.-