Una nueva circular prohíbe salir a la calle en los institutos sólo a los menores de 14 años

"Con la desafortunada circular, la Consejería de Educación ha alterado el funcionamiento normal de los centros sin que hubiera necesidad", resaltó Juan García de la Mota, director del instituto Vallecas-Magerit y miembro de la junta de directores de secundaria, quien resaltó que la nueva orden no viene sino a asentar la situación anterior, en el que cada consejo escolar decidía qué hacer con sus alumnos en el recreo. "Porque desde que se envió la circular, los alumnos protestaron en los centros que teníamos abiertos y que decidimos cerrar; y donde siempre habían estado cerrados protestaron también al ver que el resto protestaba", manifestó.En cualquier caso, García de la Mota, consideró positivo que la Consejería de Educación, que dirige Gustavo Villapalos, haya "respetado la autonomía de los centros", al establecer que sea el consejo escolar de cada uno de ellos quién decida que hacer con sus alumnos de entre 14 y 16 años. "Tendremos que estudiar todavía el marco legal de la orden para ver si se nos exime de la responsabilidad civil y penal en caso de que le ocurra algo a nuestros estudiantes en los descansos", manifestó.

La Federación de Asociaciones de Padres Francisco Giner de los Ríos también tuvo sus objeciones a la normativa. Maite Pina, portavoz de esta asociación, consideró que durante toda la enseñanza obligatoria los chavales deben estar en los institutos "salvo que lo autoricen los padres de forma expresa". Es decir, justo al revés. "¿Por qué tenemos que prohibir los padres?", como indica la orden.

Francisco García, secretario de Enseñanza de CC OO se mostró de acuerdo: "Lo razonable es que los alumnos necesiten una autorización expresa de los padres para poder salir a la calle porque así se exime a los padres y directores de la responsabilidad de los alumnos en ese tramo horario y no se les deja desasistidos si les pasa algo", dijo. García también criticó al Gobierno regional por el desconcierto de las circulares del recreo. "La Consejería ha gobernado mal el tema desde el principio, con poca habilidad política y sin saber buscar los consensos necesarios".

En esta misma dirección apuntó Adolfo Navarro, portavoz socialista de Educación: "Villapalos se ha visto obligado a rectificar unas instrucciones que no había acordado con los directores y que era imposible ponerla en práctica". Calificó, eso sí, de "razonable" el contenido de la nueva orden, pero preguntó a la consejería "si va a dotar o no de medios a los directores para hacer posible el control en las salidas y entradas". Habrá que esperar a mañana, cuando la presidenta de su grupo, Cristina Almeida, pregunte al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, qué medidas piensa poner en marcha para garantizar la seguridad de los alumnos y profesores en los institutos.