La sequía y la excesiva extracción de agua de los pozos agotan los acuíferos de Castellón
La sequía y la excesiva extracción de agua de los más de 400 pozos de la provincia de Castellón han provocado un alarmante agotamiento de los acuíferos. En estos momentos, según el presidente de la Asociación Provincial de Pozos, Pascual Castelló, municipios como Torreblanca, Oropesa, La Vall d'Uixó o Almenara, atraviesan una situación dramática, mientras que Vila-real, Almassora, Nules, Betxí o Burriana tienen sus reservas bajo mínimos. Castelló afirma que "muchos pozos están técnicamente secos" y que "el estado es crítico en todas las poblaciones de la provincia".
Sin embargo el inter...
La sequía y la excesiva extracción de agua de los más de 400 pozos de la provincia de Castellón han provocado un alarmante agotamiento de los acuíferos. En estos momentos, según el presidente de la Asociación Provincial de Pozos, Pascual Castelló, municipios como Torreblanca, Oropesa, La Vall d'Uixó o Almenara, atraviesan una situación dramática, mientras que Vila-real, Almassora, Nules, Betxí o Burriana tienen sus reservas bajo mínimos. Castelló afirma que "muchos pozos están técnicamente secos" y que "el estado es crítico en todas las poblaciones de la provincia".
Inactividad del Consell
Sin embargo el interior de Castellón aún padece más los efectos de la sequía, "ya que aquí, tanto agricultores como ganaderos deben abastecerse con camiones cuba para paliar la falta de agua, con el consiguiente incremento de costes de producción, que unido a las repetidas crisis sufridas por el sector ganadero, han provocado un descenso en las rentas que convierte la situación en insostenible" afirma el presidente de la Asociación de Pozos, quien asegura que "aún así, hay que dar gracias porque las temperaturas no han sido tan elevadas como otros años ya que, de lo contrario, estaríamos hablando de una catástrofe sin precedentes".Pero además de la carencia de agua, inquieta su mala calidad. La gran cantidad de nitratos y la salinidad, causada por la intrusión marina, preferentemente en los acuíferos costeros, desaconsejan el consumo en los domicilios de muchos municipios de la provincia. Pascual Castelló ha manifestado su preocupación porque, según dice, "todos los pozos, y son más de 400, tienen un exceso de contaminación por nitratos". Las comarcas de la Plana Baixa y Millars sufren más este problema, con niveles de nitratos muy por encima del máximo de 50 miligramos por litro recomendados por la Organización Mundial de la Salud.
El presidente de la asociación provincial de pozos reconoce que los agricultores "tienen parte de culpa" por el empleo de abonos nitrogenados. No obstante responsabiliza sobre todo a las empresas azulejeras "que utilizan cantidades de nitratos muy superiores a las que nosotros empleamos y de forma mucho más concentrada, vertiéndolas sin control en el subsuelo".
Castelló justifica este argumento al aseverar que los mayores índices de contaminación se observan en Onda, Alcora, Ribesalbes, Vila-real y Nules, donde se aglutinan la mayor parte de las industrias cerámicas de la provincia. El presidente de los pozos de Castellón se ha mostrado pesimista respecto a la erradicación de este problema. Pascual Castelló asegura que, como mínimo, el nivel excesivo de nitratos en los acuíferos no podrá eliminarse hasta dentro de unos 10 años.
También desde la Unió de Llauradors lanzan un mensaje de alerta por el estado de las reservas subterráneas. El responsable de aguas de este colectivo en Castellón, José Ramón Urbán, recuerda que el pasado otoño "ya avisamos del agotamiento de estos recursos y de la elevada concentración de sales". A juicio de Urbán, "los agricultores de la provincia de Castellón son los primeros en aprovechar y reutilizar las aguas y ha quedado demostrada su responsabilidad", por lo que lamenta que desde las diferentes administraciones "no se haya hecho prácticamente nada por aportar soluciones definitivas". La primera consecuencia de la sequía en el cultivo de cítricos, si no llueve en las próximas fechas, será la pérdida de calibre en el fruto "que restará competitividad en los mercados y producirá cuantiosas pérdidas en uno de los sectores económicos más importantes de la provincia", concluye el responsable de aguas de la Unió.
El negativo panorama dibujado por Castelló es compartido por el Bloc, que acusa de la gravedad de la situación a la Generalitat. El responsable de la política agraria de la formación nacionalista, Vicent Carda, apuntó ayer en Castellón que el modelo de desarrollo impulsado por el Consell - "Zaplana y sus dirigentes siguen reclamando parques temáticos y campos de golf sin calibrar la repercusión de estas infraestructuras"- y su incapacidad para desbloquear los planes de abastecimiento previstos revelan "la nefasta gestión" del PP en este campo.