Un apagón deja a oscuras el centro de Madrid durante 10 minutos y afecta dos horas a 40.000 usuarios

El centro de Madrid se quedó a oscuras en la madrugada de ayer. La penumbra cayó sobre una zona urbana donde viven al menos 200.000 personas (40.000 clientes de Unión Fenosa) por una repentina avería que ocasionó un cortocircuito en una subestación eléctrica sita en la Casa de Campo, cercana a la carretera de Castilla. A las 2.45 se apagaron los escaparates, las farolas de alumbrado público y los semáforos. Tampoco había luz dentro de los edificios. Medio Madrid estaba entre tinieblas. Hasta la cadena SER permaneció algunos segundos sin emitir. Según Unión Fenosa, el apagón fue total durante 1...

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El centro de Madrid se quedó a oscuras en la madrugada de ayer. La penumbra cayó sobre una zona urbana donde viven al menos 200.000 personas (40.000 clientes de Unión Fenosa) por una repentina avería que ocasionó un cortocircuito en una subestación eléctrica sita en la Casa de Campo, cercana a la carretera de Castilla. A las 2.45 se apagaron los escaparates, las farolas de alumbrado público y los semáforos. Tampoco había luz dentro de los edificios. Medio Madrid estaba entre tinieblas. Hasta la cadena SER permaneció algunos segundos sin emitir. Según Unión Fenosa, el apagón fue total durante 10 minutos y afectó a la zona de Nuevos Ministerios, Azca, Gran Vía, Bilbao, el barrio de Salamanca y el paseo de Pintor Rosales. La compañía eléctrica mantiene que al cabo de diez minutos ya se había restablecido el suministro en muchos de los hogares, aunque admite que algunas empresas y negocios tardaron hasta dos horas en disponer de energía "porque algún centro de transformación quedó fuera de servicio y afectó a empresas que necesitan mayor energía para su actividad", dijo Ángel Guerra, director de red de Unión Fenosa

Varios ciudadanos que caminaban por la Gran Vía a las tres de la madrugada explicaron ayer que se sobrecogieron con el apagón: "Me asusté al ver todo a ciegas. Parecía algo gordo", explicó Emilio. En la oscuridad total, sólo brillaban los faros de los coches". El empleado de un bar de copas de Quevedo describió que se fueron los plomos y se fundieron varias bombillas: "Estuvimos una hora sin luz y tuvimos que cerrar el local".

Unión Fenosa sostiene que el apagón tuvo escasa repercusión y lo fundamenta en el hecho de que sólo recibió 75 llamadas de queja entre las tres y las cuatro de la madrugada. "Además, sólo se han presentado ocho reclamaciones", añadió un portavoz.

La causa del corte de luz fue una avería en la subestación de Unión Fenosa, donde existe una conducción de 220.000 voltios. La avería provocó unas chispas que prendieron en unas hierbas secas colindantes y ocasionaron un incendio de 6.000 metros cuadrados de pastos, según la Policía Municipal y los bomberos.

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