Unos 'sanfermines' ¿para todos?
Minusválidos físicos exigen al Ayuntamiento pamplonés igualdad en el disfrute de las fiestas
Las fiestas no son para todos. Es falso. Hay un colectivo que debe, obligatoriamente, verlas desde la barrera. Porque los sanfermines son precisamente eso para los minusválidos físicos, unas fiestas con barreras infranqueables que pretenden derribar.Por segundo año consecutivo,el pasado 7 de julio casi medio centenar de minusválidos con sus sillas de ruedas y junto a amigos y familiares, realizaron un singular paseíllo desde el Ayuntamiento hasta la plaza de toros. Convocados por la Coord...
Minusválidos físicos exigen al Ayuntamiento pamplonés igualdad en el disfrute de las fiestas
Las fiestas no son para todos. Es falso. Hay un colectivo que debe, obligatoriamente, verlas desde la barrera. Porque los sanfermines son precisamente eso para los minusválidos físicos, unas fiestas con barreras infranqueables que pretenden derribar.Por segundo año consecutivo,el pasado 7 de julio casi medio centenar de minusválidos con sus sillas de ruedas y junto a amigos y familiares, realizaron un singular paseíllo desde el Ayuntamiento hasta la plaza de toros. Convocados por la Coordinadora de Disminuidos Físicos, escenificaron una improvisada corrida en la que hubo toreros, subalternos y astados, para reivindicar, al menos, su derecho a entrar en el coso, que carece de ni un solo paso accesible para los disminuidos físicos. "Nos sentimos siempre marginados", dice Ana María Guerendiáin, presidenta de la coordinadora. "Estamos cansados de que se comprometan a eliminar barreras, politicen los temas, nos tomen el pelo y al final no hagan nada", añade.
El pasado junio, el pleno municipal rechazó una moción de Batzarre sobre accesibilidad de minusválidos a las fiestas y, en su lugar, se aprobó otra de UPN que los afectados consideran "insuficiente". Batzarre pidió la reserva de plazas de aparcamiento céntricas y de lugares señalizados en los puntos festivos, clarificar los itinerarios de autobuses adaptados y exigir rampas de acceso a los recintos festivos, además de garantizarles pases para presenciar desde el Ayuntamiento el chupinazo o los encierros. UPN se limitó a aprobar los aparcamientos y la contratación de personal para ayudar a los disminuidos a acceder a los actos festivos. Una respuesta "escasa, según los minusválidos, que demandan su acceso directo al ocio y no una variante asistida.
La alcaldesa, Yolanda Barcina, se ha defendido asegurando que nunca antes los minusválidos han podido disfrutar de aparcamientos reservados como este año y que algunos de ellos han sido especialmente invitados a presenciar actos festivos desde el consistorio y la plaza de toros. Javier Itúrbide, director del área de Cultura, respondió diciendo que la coordinadora no le remitió los símbolos internacionales de accesibilidad ni le señaló los lugares y actos que debía proteger esa imagen.
"No es tan difícil", dice Juan Mari, un disminuido de 37 años. "Llevamos años pidiéndolo, pero cuando ellos disfrutan de todo en todos lados es muy fácil olvidarse de nosotros, que no podemos hacerlo. Eso sí", añade, "en marzo pasado el Ayuntamiento se adhirió a la Declaración de Barcelona, que demanda unas tramas urbanas accesibles a todos sus habitantes, pero Pamplona no cumple esos requisitos". "Yo creía que las fiestas eran para todos", rezaba su pancarta festiva. El año próximo volverán a manifestarse si el Ayuntamiento se vuelve a olvidar de ellos.