Un escolta de Benegas sospechó de un posible etarra en el portal del diputado socialista
El Cuerpo Nacional de Policía está tratando de averiguar si el dirigente socialista vasco Txiki Benegas fue objeto o no de un intento de atentado el pasado lunes en San Sebastián cuando se disponía a salir de su casa. Uno de sus escoltas vio en el portal a un individuo que le infundió sospechas e hizo un gesto con el que dejó entrever su pistola. El individuo abandonó el lugar. El agente halló luego mucho parecido entre esa persona y un miembro del comando Donosti. No obstante, la dirección de la Policía señaló después que no hay indicios de que hubiese sido un intento de atentado.
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El Cuerpo Nacional de Policía está tratando de averiguar si el dirigente socialista vasco Txiki Benegas fue objeto o no de un intento de atentado el pasado lunes en San Sebastián cuando se disponía a salir de su casa. Uno de sus escoltas vio en el portal a un individuo que le infundió sospechas e hizo un gesto con el que dejó entrever su pistola. El individuo abandonó el lugar. El agente halló luego mucho parecido entre esa persona y un miembro del comando Donosti. No obstante, la dirección de la Policía señaló después que no hay indicios de que hubiese sido un intento de atentado.
El incidente, que ha dado pie a sospechar que Txiki Benegas -presidente del Partido Socialista de Euskadi (PSE) y diputado en el Congreso- podría haber sido objeto de un intento de atentado por parte de ETA, se produjo a las 10.00 del pasado lunes. El político vasco iba a abandonar su domicilio para dirigirse al aeropuerto, por lo que los escoltas que le protegen habían tomado posiciones junto al inmueble donde reside el dirigente socialista, en San Sebastián.Uno de los policías, que se encontraba dentro del portal, vio a un hombre que no era habitual en el edificio y que le infundió sospechas. Vestido con pantalón vaquero, y con una mano en el bolsillo subió al primer piso del inmueble y poco después bajó al portal. El agente hizo un ademán con el que dejó entrever su pistola. El individuo abandonó el lugar a paso rápido y cruzó la calle con el semáforo en rojo para los peatones. Unos segundos después, otro individuo que había estado apostado en las cercanías también abandonó la zona, según fuentes policiales.
A la hora en la que se produjo el incidente suele ser habitual el trasiego de personas en ese mismo portal, por el que se accede a un consultorio médico. Comerciantes y vecinos de la calle que fueron consultados no recordaron haber observado movimientos extraños.
Estatura
Tras el incidente, uno de los agentes de la escolta de Benegas acudió a la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en la capital guipuzcoana para dar cuenta de lo sucedido y tratar de identificar al individuo sospechoso. Uno de los policías identificó "mucho" la fotografía del presunto etarra Josu Ordóñez Fernández, integrante del comando Donosti, si bien la estatura de éste, en torno a 1,90 metros, difiere de la que el agente calculó que tenía el individuo sospechoso -1,70-.
Hace cuatro semanas, la Ertzaintza acordonó un tramo de la calle donde se encuentra la vivienda de Benegas debido a que un vehículo estacionado levantó sospechas acerca de que pudiera tratarse de un coche-bomba.
El director general de la Policía, Juan Cotino, declaró ayer en Vall d'Uixó (Castellón) que no hay indicios de que el incidente del lunes fuera un intento de atentado. Tras señalar que la obligación de los escoltas es tratar de ver a personas sospechosas, añadió que uno de los agentes que protegen a Benegas "pudo ver a algún sospechoso que no identificó y luego, en comisaría, con los archivos de fotos dijo que el que figura en una de ellas [un presunto terrorista] podía parecerse".
"Es evidente"
En una comparecencia ante los periodistas ayer por la mañana en el Congreso, Txiki Benegas señaló que las informaciones difundidas sobre el incidente ocurrido en el portal de su casa son ciertas si bien ha cometido una "imprudencia" quien las ha dado a conocer. Señaló que desde 1977 ha tenido "más problemas" de seguridad pero que no le gusta exhibir lo que le ocurre en ese terreno porque entra dentro de su trabajo y de su lucha por la libertad y por la paz. "He tenido que enterrar ya a mucha gente, a amigos y a compañeros, como para hacer gala de haber tenido un incidente", añadió.
Txiki Benegas manifestó que es "evidente" que durante los últimos meses los miembros del PSOE han sido uno de los principales objetivos de la violencia de ETA y sus simpatizantes en el País Vasco. Tras recordar los asesinatos de Fernando Buesa y de José Luis López de Lacalle, señaló que muchos concejales socialistas están sufriendo habitualmente la violencia callejera del entorno de la organización terrorista. El presidente del PSE aseguró que continuará luchando por la paz y la libertad del pueblo vasco.