Una avería paraliza en San Roque la refinería de CEPSA

Las instalaciones de la refinería Gibraltar de CEPSA en San Roque (Cádiz) quedaron ayer paralizadas después de que a las 6.15 se produjese una avería en un transformador eléctrico, según confirmaron fuentes de la firma petrolera. Durante todo el día, un equipo de 120 personas intentó poner en marcha de nuevo las unidades de la fábrica que se vieron afectadas por el incidente, después de que el transformador sufriese una deflagración que causó la parada de emergencia de todos los equipos que cuentan con suministro eléctrico."El problema se ha producido en un controlador de salida de un transfor...

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Las instalaciones de la refinería Gibraltar de CEPSA en San Roque (Cádiz) quedaron ayer paralizadas después de que a las 6.15 se produjese una avería en un transformador eléctrico, según confirmaron fuentes de la firma petrolera. Durante todo el día, un equipo de 120 personas intentó poner en marcha de nuevo las unidades de la fábrica que se vieron afectadas por el incidente, después de que el transformador sufriese una deflagración que causó la parada de emergencia de todos los equipos que cuentan con suministro eléctrico."El problema se ha producido en un controlador de salida de un transformador de alta tensión, que ha debido tener una pérdida de aceite, que se ha inflamado afectando a una de las líneas de alimentación que llega desde la subestación de la central térmica de la compañía Sevillana de Electricidad, interrumpiendo el suministro a algunas unidades de producción de la refinería", explicó Juan Pérez de Haro, director de CEPSA.

Los responsables de la refinería avisaron de la posibilidad de que las chimeneas de la fábrica mantuviesen, durante un tiempo, las llamas más elevadas a causa de la parada, pero insistieron en que tan sólo se trataría de una imagen espectacular y no perjudicial, ni peligrosa. "Ésta es la consecuencia directa de lo ocurrido y ya se ha puesto todo en conocimiento del Centro Provincial de Coordinación de Emergencias", señaló el portavoz de la refinería.

A pesar de que la práctica totalidad de la fábrica se vio parada por el incidente, la sección de producción de aceites lubricantes y la de productos petroquímicos siguió trabajando sin problemas. Esta refinería ha estado en los dos últimos años a la cabeza de la destilación de crudo en España, con un total de 11 millones de toneladas por año.

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