Un obrero ingresa en la UCI tras electrocutarse en una obra
La construcción se cobró ayer una nueva víctima. Un obrero de 45 años y de origen polaco resultó ayer herido grave al recibir una fuerte descarga eléctrica en una obra de Alcobendas (86.200 habitantes), según informó un portavoz del servicio de urgencias 061 del Insalud. La víctima sufrió una parada cardiorrespiratoria como consecuencia de la electrocución, pero los médicos de una UVI móvil lograron reanimarle. Anoche se encontraba grave en la unidad de cuidados intensivos del hospital La Paz, según explicó un portavoz de este centro.
El accidente ocurrió alrededor de las seis de la tar...
La construcción se cobró ayer una nueva víctima. Un obrero de 45 años y de origen polaco resultó ayer herido grave al recibir una fuerte descarga eléctrica en una obra de Alcobendas (86.200 habitantes), según informó un portavoz del servicio de urgencias 061 del Insalud. La víctima sufrió una parada cardiorrespiratoria como consecuencia de la electrocución, pero los médicos de una UVI móvil lograron reanimarle. Anoche se encontraba grave en la unidad de cuidados intensivos del hospital La Paz, según explicó un portavoz de este centro.
El accidente ocurrió alrededor de las seis de la tarde en la avenida de la Industria de Alcobendas, cuando el herido entró por causas desconocidas en una caseta llena de cables y sufrió una descarga eléctrica, según explicó el portavoz del 061 del Insalud.
Cuando llegaron los facultativos, la víctima no respiraba, por lo que iniciaron las maniobras de reanimación. Tras estabilizarle, le trasladaron a la Unidad de Quemados del hospital La Paz.
A lo largo de este año han muerto ya 10 personas en accidentes producidos en la construcción. En 1999, el tajo se cobró 85 vidas, según los datos facilitados de los sindicatos Comisiones Obreras y UGT.
El último accidente grave por una electrocución en la construcción ocurrió el pasado 28 de marzo, cuando un obrero marroquí resultó herido grave al caerse desde el tejado de una vivienda y precipitarse desde seis metros de altura tras recibir una descarga eléctrica. Este suceso ocurrió en una obra de La Navata (Galapagar) y el herido sufrió contusiones, quemaduras y golpes por todo el cuerpo.