Los vigilantes de los juzgados se incautan de 165 navajas y 3 pistolas

El juez decano de Madrid, Fernando Fernández, destacó ayer la labor de los servicios de seguridad de los juzgados de la plaza de Castilla, a cuyas intalaciones acuden a diario unas 6.000 personas entre testigos, acusados, abogados... Los agentes de este servicio se incautaron el año pasado, con ayuda de los detectores de metales que hay en los accesos a esta sede judicial, de 165 navajas, 70 tijeras, 65 aerosoles, 116 cámaras y grabadoras de acceso no autorizado, 3 pistolas y 12 sierras. En la memoria de actividades de los juzgados de 1999 se hace mención también a los juicios rápidos e inmedi...

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El juez decano de Madrid, Fernando Fernández, destacó ayer la labor de los servicios de seguridad de los juzgados de la plaza de Castilla, a cuyas intalaciones acuden a diario unas 6.000 personas entre testigos, acusados, abogados... Los agentes de este servicio se incautaron el año pasado, con ayuda de los detectores de metales que hay en los accesos a esta sede judicial, de 165 navajas, 70 tijeras, 65 aerosoles, 116 cámaras y grabadoras de acceso no autorizado, 3 pistolas y 12 sierras. En la memoria de actividades de los juzgados de 1999 se hace mención también a los juicios rápidos e inmediatos (aquellos ideados para juzgar a los sorprendidos en flagrante delito con la máxima celeridad). Sobre los inmediatos (juzgar a una persona en 48 horas), el decano señaló que entre el 3 de mayo pasado, cuando empezaron a funcionar, y hasta finales de año se celebraron 104. Asimismo, se contabilizaron 761 juicios rápidos, frente a los 551 celebrados en 1998. El decano señaló que, aunque están aumentando progresivamente, la cifra de juicios rápidos e inmediatos de este tipo es aún muy reducida en función de las previsiones que se hicieron.

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Asimismo, el decano calificó de excesivo el número de expedientes tramitados por cada uno de los tres Juzgados de Vigilancia Penitenciaria (1.500), así como la población reclusa que deben atender (2.500 presos por juzgado). En opinión del decano, es necesario crear un cuarto juzgado de este tipo que permita llevar a cabo una vigilancia y control adecuados de los presos. También destacó el funcionamiento de los Juzgados de lo Social, cada uno de los cuales atendió un total de 780 asuntos.

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