La química del maquillaje: La firma Paule Chemical de productos para el calzado cumple 25 años con la exportación en el punto de mira
Desde que hace 25 años José Torres comenzó a distribuir una marca americana llamada Paule Chemical, basada en especialidades químicas para la industria del calzado en Elche, la empresa y el sector han cambiado sustancialmente. En la actualidad, y desde hace ocho años, la marca es "capital 100% español", como recalca Torres, y ha expandido su gama de productos hasta el punto de ofrecer toda una serie de formulaciones encaminadas a eliminar de un plumazo el peligro de la utilización de los disolventes orgánicos, altamente contaminantes.La fórmula es simple. Todos los productos ofertados tienen l...
Desde que hace 25 años José Torres comenzó a distribuir una marca americana llamada Paule Chemical, basada en especialidades químicas para la industria del calzado en Elche, la empresa y el sector han cambiado sustancialmente. En la actualidad, y desde hace ocho años, la marca es "capital 100% español", como recalca Torres, y ha expandido su gama de productos hasta el punto de ofrecer toda una serie de formulaciones encaminadas a eliminar de un plumazo el peligro de la utilización de los disolventes orgánicos, altamente contaminantes.La fórmula es simple. Todos los productos ofertados tienen la posibilidad de suministrarse en una base acuosa, lo que elimina la posibilidad de que debido a un mal uso o a un accidente, dañen de manera casi irreversible al medio ambiente.
La industria auxiliar del calzado, aparentemente de menor peso y trascendencia que el sector zapatero, es precisamente la encargada de dar forma a los cambios que la moda ofrece cada temporada. Empresas como Paule Chemical hacen posible lo que, según la definición de Torres, es el "maquillaje para la piel". Es decir, las pieles brillantes, rojas, o azules, sólo existen previo paso por el tratamiento apropiado dado por la química. De igual manera, este maquillaje se amplía para dar forma y color a un sinfín de complementos y puede convertir un simple tacón de plástico en una esbelta pieza de madera, o incluso de piel, o dar la posibilidad de mil gamas de colores inimaginables a las sandalias o a los cinturones. Como se ve, la moda debe parte de su genialidad a las mezclas realizadas en los laboratorios entre probetas y matraces.La asistencia a las ferias internacionales, como afirma el gerente, "es fundamental para estar al tanto de los cambios ya que es el espacio en el que se dicta la moda".
La empresa ilicitana, además de poner a disposición su varita mágica para un sinfín de firmas de alto nivel, abre la posibilidad para que vendedor y comprador trabajen juntos. La "química de la especialidad", como asegura el gerente, "hace que mercantil y compradores trabajen unidos, según la estrategia empresarial y el innovador sistema de ventas de nuestra empresa". Precisamente, este modo de funcionar basado en la asistencia técnica al cliente, en el que por ejemplo se explica la manera idónea de aplicar cualquier producto, ha hecho posible la permanencia de Paule Chemical durante 25 años en un sector caracterizado, hasta hace pocos años, precisamente por la vida efímera de las mercantiles.
Paule Chemical se fundó en España en 1974. Los dos primeros años la empresa se mantuvo en funcionamiento con un trabajador. En la actualidad, en la firma trabajan 40 personas en España, y 30 representantes y distribuidores en el extranjero. Las ventas han crecido en los últimos cinco años, "menos en el pasado año, en el que se ha observado un pequeño descenso", asegura José Torres. La factoría ilicitana alcanza anualmente un nivel de facturación de 700 millones de pesetas.
El crecimiento de la mercantil se debe en buena parte a las ventas exteriores, que actualmente alcanzan cotas del 35% de la producción. Torres lo tiene claro y afirma que "el futuro pasa necesariamente por la exportación". Su expansión internacional viene avalada por su trabajo con firmas instaladas en países como Portugal, Turquía, Marruecos, Argentina, Argelia, México, Egipto, Italia, Taiwan y China.
El mercado chino, al igual que ocurre en todo el ámbito del calzado, ha captado el interés de los productores nacionales que ven en las altas capas de la población china, de gran nivel adquisitivo y con preferencias por la moda europea, la posibilidad de introducirse en un país de amplias perspectivas. Para Paule Chemical es diferente ya que tiene la posibilidad de estar en los dos frentes. Ya ha alcanzado acuerdos con diversas firmas de calzado chinas, uno de los países que capitalizan, de manera temible para el resto, el mercado de calzado internacional.
Productos para calzado sin disolventes orgánicos
La factoría ilicitana Paule Chemical ha conseguido reunir la tecnología necesaria para realizar los acabados del calzado y componentes para las firmas internacionales más importantes de Estados Unidos y Europa, y actualmente, posee una variada línea de productos que cubre cualquier necesidad.Uno de los departamentos en los que la firma basa su potencial es la sección dedicada a Investigación y Desarrollo. Un espacio dotado con tres ingenieros químicos trabaja continuamente en nuevas ideas y proyectos que llegan a través de clientes y colaboradores, y que se transforman en breve plazo en las nuevas texturas o colores que llenan los escaparates de las tiendas cada temporada. El equipo técnico es, según el gerente José Torres, "la estrella de la factoría", ya que están en contacto, de manera continuada, con las casas que suministran los componentes químicos, y las fábricas de curtidos.
Los proyectos de futuro para la pequeña factoría instalada en Elche pasan por una nueva ubicación, sobre un terreno de 20.000 metros cuadrados, fruto de la creciente demanda experimentada en los países de medio mundo a los que Paule Chemical ha venido exportando con éxito. "Necesitamos un emplazamiento distinto al de una empresa convencional, ya que toda la instalación de la factoría es antideflagrante", asegura el gerente.
La mercantil cubre prácticamente cualquier producto para el acabado del calzado pero, en los últimos años, el esfuerzo de la factoría ha sido el desarrollo de productos en base acuosa para eliminar el uso de disolventes orgánicos y así poder ofrecer alternativas a aquellos clientes que quieren evitar los riesgos que se pueden derivar de un mal uso de este tipo de productos. Dentro de esta línea, denominada en base acuosa, la factoría ilicitana ofrece acondicionadores, cremas, líquidos engrasantes, abrillantadores, reparadores, tintas y colorantes, así como ceras líquidas para usos diversos. La principal característica de este tipo de formulación, según explica el gerente, "se basa en que los residuos que se generan, al tener la base acuosa son más fáciles de eliminar", afirma Torres. La factoría tiene más de 1.000 clientes, entre los que se encuentran las primeras marcas del mercado.