Cartas al director

Retenciones de tráfico en la N-II

Me refiero a la autovía de Barcelona en sentido Madrid, entre Torrejón y el puente de San Fernando. Los atascos de tráfico son diarios y monumentales, y no sólo en las primeras horas de la mañana, como sucede en las demás autovías de acceso a Madrid, en este caso las retenciones kilométricas se mantienen en mayor o menor grado a lo largo de todo el día, oscilando desde los 10 kilómetros de la mañana a cinco o seis durante el resto del día.Son miles de vehículos atrapados continuamente en esta ratonera los que irremediablemente deben perder una hora para recorrer 10 kilómetros.

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Me refiero a la autovía de Barcelona en sentido Madrid, entre Torrejón y el puente de San Fernando. Los atascos de tráfico son diarios y monumentales, y no sólo en las primeras horas de la mañana, como sucede en las demás autovías de acceso a Madrid, en este caso las retenciones kilométricas se mantienen en mayor o menor grado a lo largo de todo el día, oscilando desde los 10 kilómetros de la mañana a cinco o seis durante el resto del día.Son miles de vehículos atrapados continuamente en esta ratonera los que irremediablemente deben perder una hora para recorrer 10 kilómetros.

Para comprobar la veracidad de lo antes mencionado, no es necesario ser masoquista comprobándolo sobre el terreno, basta con sintonizar en Radio 5 Todo Noticias la información que gentilmente nos ofrece sobre tráfico cada 30 minutos.

Reconozco que el tema del tráfico y sus soluciones no es noticia, pero es que me estoy refiriendo a un problema único en España, que tendría fácil solución con obras de modificación de infraestructuras en unos dos kilómetros en torno al puente de San Fernando.

Claro que seguirán siendo noticia en todos los medios los puntuales retrasos por niebla en Barajas que acumulan un retraso medio de una hora, o el trazado de las nuevas líneas de AVE.

Mientras, los usuarios de la N-II, derrochando combustible, machacando los vehículos, perdiendo, además de los nervios, horas de trabajo, y todo esto sin que, al parecer, a nadie le importe, pues somos pacíficos y no cortamos carreteras ni hacemos manifestaciones sonadas.

No somos noticia y sólo nos queda esperar pacientemente a que se solucionen los problemas de Barajas, las insonorizaciones de pisos, se construyan no sé cuántas pistas, un nuevo aeropuerto en Campo Real o donde sea, AVE a todas las capitales para acortar unos minutos, y hasta lleguemos a Marte, para que quizás a alguien se le encienda la lucecita y se acuerde de nosotros, los de la N-II. - Rafael López Ciudad. Alcalá de Henares, Madrid.

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