ETA ROMPE LA TREGUA

Aznar reclama al "lehendakari" que "asuma su responsabilidad" ante el desafío de ETA

El presidente del Gobierno, José María Aznar, reclamó ayer en La Moncloa al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que "asuma su responsabilidad" ante la decisión de ETA de poner punto final a 14 meses de tregua. A lo largo de la entrevista, ambos líderes constataron sus diferencias sobre cómo abordar la actual crisis en el País Vasco. Sin embargo, fuentes oficiales de La Moncloa eludieron hacer referencia alguna a esas divergencias en un momento en el que las principales formaciones políticas intentan reforzar la unidad de los partidos democráticos ante la amenaza terrorista.Una de las discrepanci...

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El presidente del Gobierno, José María Aznar, reclamó ayer en La Moncloa al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que "asuma su responsabilidad" ante la decisión de ETA de poner punto final a 14 meses de tregua. A lo largo de la entrevista, ambos líderes constataron sus diferencias sobre cómo abordar la actual crisis en el País Vasco. Sin embargo, fuentes oficiales de La Moncloa eludieron hacer referencia alguna a esas divergencias en un momento en el que las principales formaciones políticas intentan reforzar la unidad de los partidos democráticos ante la amenaza terrorista.Una de las discrepancias entre Aznar e Ibarretxe estriba en el deseo del lehendakari de convocar en breve una nueva mesa o foro de partidos que sustituya a la de Ajuria Enea. En esa mesa estaría incluida Herri Batasuna. La iniciativa ya fue planteada en el pasado por el PNV y rechazada por el PP. Ayer, Aznar insistió en ese rechazo pese a que Ibarretxe reiteró, a su vez, que, a su juicio, cualquier salida política para el conflicto en Euskadi pasa por esa fórmula.

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Ibarretxe le dijo a Aznar, desde un principio, que no había ido a La Moncloa "a restar sino a sumar fuerzas por la paz". También le dijo que su pretensión no era "repartir culpas y responsabilidades" sobre lo sucedido durante estos 14 meses de tregua, sino "hacer posible que se recomponga la situación" tras la amenaza etarra de poner fin al alto el fuego a partir de mañana, día 3 de diciembre. En cualquier caso, el lehendakari y el partido al que pertenece, el PNV, tienen intención de mantener sus compromisos institucionales con Euskal Herritarrok y mantener vivo el pacto de Lizarra. Aznar se comprometió a no presionarle para que rompa, en estos momentos, con su socio parlamentario de la izquierda abertzale.

Aznar dio a Ibarretxe un "rotundo sí" a las manifestaciones unitarias convocadas en Euskadi en favor de la paz. Asimismo, el lehendakari y el jefe del Ejecutivo acordaron mantener un permanente canal de comunicación en estos momentos.

El desafío etarra pendió sobre la reunión celebrada ayer en la Moncloa. La entrevista, de poco más de hora y media de duración, tuvo un tono cordial. Ambos decidieron poner en común lo que les une, aunque no es mucho, e intentaron marginar sus diferencias.

El presidente del Ejecutivo central, según fuentes gubernamentales, habló "con absoluta sinceridad y franqueza". Las mismas fuentes manifestaron al finalizar la reunión que "la relación institucional está salvaguardada". Tras la tensión y las diferencias mantenidas en las últimas semanas entre los líderes del Gobierno central y el autonómico, Aznar e Ibarretxe han abierto un canal de comunicación permanente ante lo que pueda suceder en los próximos días y semanas.

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En este clima de mutua franqueza, Aznar comunicó a Ibarretxe que debe "asumir su responsabilidad" ante la situación creada tras el anuncio de la ruptura de la tregua. El jefe del Ejecutivo agregó que no presionará a Ibarretxe y permitirá que gestione de la manera que crea más conveniente la crisis abierta tras la amenaza etarra y, por eso, no será beligerante si Ibarretxe cree necesario mantener su compromiso institucional con Euskal Herritarrok como la mejor fórmula para salir de esta situación.

Tanto el lehendakari como el partido al que pertenece, el PNV, creen que es conveniente, al menos mientras ETA no empuñe de hecho las armas y vuelva a matar, mantener la relación y los compromisos políticos con EH porque puede ser una forma de presionar indirectamente a la banda armada. Fuentes nacionalistas señalan que se intentará mantener esos compromisos aunque haya atentados.

Movilizaciones

Asimismo, durante la reunión de ayer en La Moncloa se puso sobre la mesa la iniciativa de las movilizaciones por la paz, promovidas por el propio lehendakari. Al expresarle Aznar su total respaldo a cualquier acto en favor del cese de la violencia, siempre que éstos sean unitarios, deslizó a Ibarretxe un recuerdo sobre las masivas movilizaciones populares del verano de 1997 con motivo del asesinato del concejal del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco. Aznar ya sabía, en ese momento, que EH se sumará a las concentraciones convocadas para mañana en Euskadi, aunque llevarán su propio lema. Ibarretxe calificó la decisión de EH de "muy esperanzadora"

La necesidad de crear una nueva mesa de partidos que sustituya a Ajuria Enea fue el eje del encuentro de Ibarretxe con el líder de IU, Julio Anguita, quien comentó tras la reunión: "Tenemos 48 o 72 horas para evitar que se rompa la tregua. No se trata de cesiones ante la amenaza, se trata de hacer uso de la inteligencia y la valentía".

Anguita dijo que PP y PSOE también están de acuerdo en que haya un nuevo foro con "todos los representantes del pueblo vasco" puesto que el punto 10 de Ajuria Enea, firmado por todos los partidos, así lo reconoce.

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