El republicano Carod se entrevista hoy con Pujol sin ninguna convicción de lograr un pacto nacionalista

El secretario general de Esquerra Republicana (ERC), Josep Lluís Carod, acudirá hoy a su entrevista con el presidente en funciones de la Generalitat, Jordi Pujol, convencido de que la única alianza realmente existente es la que mantienen desde hace casi cuatro años Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP). "CiU y el PP sienten un amor incómodo, pero son un perfecto matrimonio de conveniencia", afirmó ayer. Pere Esteve y Josep Antoni Duran contribuyeron ayer a aumentar aún más el escepticismo de ERC al subrayar ambos las dificultades de forjar un pacto nacionalista y al dejar la puer...

El secretario general de Esquerra Republicana (ERC), Josep Lluís Carod, acudirá hoy a su entrevista con el presidente en funciones de la Generalitat, Jordi Pujol, convencido de que la única alianza realmente existente es la que mantienen desde hace casi cuatro años Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP). "CiU y el PP sienten un amor incómodo, pero son un perfecto matrimonio de conveniencia", afirmó ayer. Pere Esteve y Josep Antoni Duran contribuyeron ayer a aumentar aún más el escepticismo de ERC al subrayar ambos las dificultades de forjar un pacto nacionalista y al dejar la puerta abierta al apoyo de los conservadores a la investidura de Pujol.

El presidente del Parlament, Joan Rigol, cerrará esta mañana con Jordi Pujol la ronda de entrevistas para la investidura. Y a las cinco de la tarde, cuando ya cuente presumiblemente con el encargo de formar gobierno, Pujol se reunirá con Carod en el Palau de la Generalitat. En principio, y según decidió ayer con sus más estrechos colaboradores, el líder independentista asistirá al encuentro sin ninguna propuesta preparada, con la única intención de escuchar. Es una forma -según explicó un miembro de la dirección- de mostrar el profundo escepticismo con que Esquerra afronta las negociaciones para la investidura de Jordi Pujol.De hecho, a pesar de las grandes declaraciones de amor hacia ERC que los dirigentes de Convergència Democràtica expresaron en el consejo nacional del pasado domingo, la cúpula de la coalición nacionalista se ha fijado el objetivo básico de que los republicanos se abstengan en la sesión de investidura. Sus estrategas consideran que con este simple gesto se romperá el empate técnico entre el bloque conservador -CiU y PP- y el progresista -PSC, ERC e IC-, separados por un solo voto, que se evidenció el pasado viernes en la constitución del Parlament. Para ser investido en la primera votación CiU necesitará el apoyo del PP.

Programa de gobierno

Llos dos negociadores de CiU de la pasada semana, Pere Esteve y Josep Antoni Duran, rebajaron ayer la euforia que ellos mismos contribuyeron a crear, justo antes de la reunión entre Pujol y Carod. El secretario general de CDC -en teoría uno de los dirigentes más proclives a pactar con Esquerra- descartó en declaraciones a TVE que esta misma semana pueda firmarse ningún pacto de legislatura. Además, se mostró convencido de que el PP "tendrá elementos políticos para adoptar una posición favorable a la investidura de Pujol".

Por su parte, el líder de Unió, Josep Antoni Duran, también subrayó que pactar con ERC antes de la investidura será prácticamente imposible: "No nos engañemos, de aquí al lunes, cuando comienza el debate de investidura, CiU y ERC no se pueden poner de acuerdo sobre un programa de gobierno", aseguró. Y añadió: "Cuando se escucha a los dirigentes de ERC decir que nos proponen 15 puntos que son negociables, uno tiene la impresión de que no será nada fácil el acuerdo", dijo, en referencia a las iniciativas legislativas que Esquerra introdujo el lunes en el Parlament.

Dos vicesecretarios generales de ERC, Josep Huguet y Joan Puigcercós, respondieron con dureza a Duran y lo acusaron de tratar de laminar cualquier posibilidad de acuerdo. Huguet afirmó que Duran trata a ERC "como a un menor de edad" y Puigcercós lo definió como "el hombre que hace el pacto con el PP y que quiere hacerse con la herencia de derechas de CiU".

Propaganda

En cualquier caso, los dirigentes de ERC han acogido con gran escepticismo las difusas ofertas de CiU, y consideran que responde a una estrategia de propaganda para evitar aparecer asociada al PP. Carod denunció ayer una "campaña mediática" para forzar el acercamiento entre CiU y ERC, aunque también alertó de otra ofensiva del PSC para atraer Esquerra hacia su polo: "Hay una campaña orquestada para que parezca que ERC pone unas condiciones desorbitadas que impiden un acuerdo con Convergència", afirmó.

Carod, que se entrevistó ayer con el presidente del Parlament, Joan Rigol, insistió en su convicción de que CiU ya se ha decidido por los conservadores. "CiU y el PP sienten un amor incómodo, pero son un perfecto matrimonio de conveniencia", dijo. En su opinión, CiU tiene el papel de "marido juerguista" con sus guiños hacia ERC, aunque siempre acaba volviendo "a los brazos de su esposa solícita", en referencia al PP. Y añadió: "Hay un cordón umbilical que les une en defensa de unos intereses determinados".