Condenado por complicidad el copiloto de un conductor ebrio

Permitir que un conductor en estado de embriaguez te traslade en tu propio coche es un acto censurable, sobre todo si estás sancionado con la suspensión temporal del permiso de conducir. Eso es lo que consideran los jueces del Tribunal Correccional de Limoges (Francia) que el pasado martes condenaron por complicidad al propietario y pasajero de un vehículo detenido en un control de alcoholemia mientras conducía un amigo suyo. Los dos superaban el límite permitido.El Tribunal de Limoges ha juzgado evidente que el pasajero y propietario del vehículo incurrió en un delito de complicidad al consen...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Permitir que un conductor en estado de embriaguez te traslade en tu propio coche es un acto censurable, sobre todo si estás sancionado con la suspensión temporal del permiso de conducir. Eso es lo que consideran los jueces del Tribunal Correccional de Limoges (Francia) que el pasado martes condenaron por complicidad al propietario y pasajero de un vehículo detenido en un control de alcoholemia mientras conducía un amigo suyo. Los dos superaban el límite permitido.El Tribunal de Limoges ha juzgado evidente que el pasajero y propietario del vehículo incurrió en un delito de complicidad al consentir que una persona ebria se colocara al volante de su coche. En su sanción, en lugar de los dos meses de prisión firme y la suspensión suplementaria de tres meses de prohibición de conducir, reclamados por el fiscal, el tribunal ha creído suficiente imponer una condena de 40 horas de trabajos de interés social.

En la misma sentencia, dada a conocer ayer, el conductor ha sido castigado con la prohibición de conducir durante un año y a dedicar un total de 100 horas a trabajos para la comunidad.

Archivado En