La oposición tacha de "impresentable" la "injerencia" en Aguas de Valencia
La oposición municipal tachó ayer de "injerencia impresentable" las recientes declaraciones del portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Grau, quien mostró su desconfianza hacia el grupo Bouygues, el socio francés de la empresa Aguas de Valencia, concesionaria del suministro del agua en la ciudad cuyo contrato expira el año 2002. El edil Manuel Moret, del Grupo Socialista-Progresista, echó ayer en cara a Grau, en el primer pleno ordinario de la Corporación, el "doble lenguaje" de los populares, que predican el liberalismo y la libertad de empresa pero no dudan en inmiscuirse en ...
La oposición municipal tachó ayer de "injerencia impresentable" las recientes declaraciones del portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Grau, quien mostró su desconfianza hacia el grupo Bouygues, el socio francés de la empresa Aguas de Valencia, concesionaria del suministro del agua en la ciudad cuyo contrato expira el año 2002. El edil Manuel Moret, del Grupo Socialista-Progresista, echó ayer en cara a Grau, en el primer pleno ordinario de la Corporación, el "doble lenguaje" de los populares, que predican el liberalismo y la libertad de empresa pero no dudan en inmiscuirse en los asuntos internos de una empresa, en relación con los problemas surgidos en el seno del consejo de administración de Aguas de Valencia. Grau defendió su "derecho a expresar libremente" su opinión y aseguró que lo único que le preocupa es la garantía de un suministro de agua de calidad y a un precio razonable. Todos los grupos apoyaron una moción sobre el proyectado desmantelamiento de la fábrica de Tabacalera en Valencia, en un pleno en el que sólo una modificación de crédito del Palau de la Música -la décima de este año- provocó cierto debate, porque supone elevar a 2.239 millones un presupuesto inicial de 1.800.