Los socialistas piden explicaciones al teniente de alcalde por su intromisión en Aguas de Valencia

El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Valencia pedirá explicaciones al teniente de alcalde, el popular Alfonso Grau, por sus constantes intromisiones en Aguas de Valencia (AVSA), concesionaria del servicio de suministro de agua potable a la ciudad. Grau desconfía del socio francés de AVSA, el grupo Bouygues, e intenta que éste reduzca su peso en la concesionaria en favor de inversores valencianos. Este pulso, iniciado hace un año, continúa ante la inminente convocatoria, prevista para el otoño, del concurso para explotar este servicio durante otros 50 o 75 años. Álvaro Aguirre, director ge...

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El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Valencia pedirá explicaciones al teniente de alcalde, el popular Alfonso Grau, por sus constantes intromisiones en Aguas de Valencia (AVSA), concesionaria del servicio de suministro de agua potable a la ciudad. Grau desconfía del socio francés de AVSA, el grupo Bouygues, e intenta que éste reduzca su peso en la concesionaria en favor de inversores valencianos. Este pulso, iniciado hace un año, continúa ante la inminente convocatoria, prevista para el otoño, del concurso para explotar este servicio durante otros 50 o 75 años. Álvaro Aguirre, director general de la compañía, se entrevistó ayer, a iniciativa propia, con la portavoz socialista en el Consistorio, Ana Noguera.

Un año después vuelve la polémica en torno a la renovación de la concesión del servicio de suministro de agua potable a la ciudad de Valencia, de titularidad municipal y explotado desde 1904 por la sociedad Aguas de Valencia (AVSA). Igual que en julio del año pasado han sido unas recientes declaraciones del teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Grau, del PP, las que han reavivado el conflicto. Grau opina que el accionista francés de AVSA, el grupo Bouygues, socio mayoritario con un 30% del capital, no es un buen gestor de empresas de agua e insiste en que acapara demasiado poder frente al resto de accionistas -BSCH (21%), el naviero Vicente Boluda (13%), Banco de Valencia (5%)-. El teniente de alcalde recordaba, a renglón seguido, que en septiembre se iniciarán los trámites para renovar el contrato más importante de la ciudad -valorado en medio billón de pesetas-, que formalmente no expira hasta el 2002. El equipo de gobierno de la ciudad, que encabeza la alcaldesa Rita Barberá, proyecta que sea una sociedad mixta, de nueva creación, la concesionaria del servicio de agua potable de Valencia durante los siguientes 50 o 75 años. El Consistorio se reservaría un 20% del capital y el resto se distribuiría entre accionistas privados -Grau insiste en que sean valencianos-. AVSA, como actual gestora del servicio, es la compañía con más posibilidades de renovar el contrato -entre otras razones, porque el Ayuntamiento tendría que pagarle cerca de 20.000 millones de pesetas en concepto de derechos de reversión si concede el servicio a otra compañía-, siempre que Bouygues reduzca su peso en la sociedad. Las declaraciones del teniente de alcalde de Valencia han causado un profundo malestar entre los consejeros de Bouygues. En este ambiente enrarecido, el director general de AVSA, Álvaro Aguirre, -los franceses lo responsabilizan de la campaña de descrédito de la que, en su opinión, están siendo objeto-inició hace unos días una ronda de entrevistas con los diferentes grupos políticos del Consistorio. Ya se ha reunido con el nuevo concejal del Agua, Ramón Isidro, y ayer hizo lo propio con la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Ana Noguera, a la que puso al corriente de los "buenos resultados de la sociedad", manifestó ayer Aguirre. La reunión que, según Noguera tuvo un carácter protocolario, la solicitó Aguirre, a título personal, hace tres días. Noguera declaró al término de la entrevista que su compañero de filas, Manuel Moret, pedirá en el pleno previsto para hoy explicaciones a Alfonso Grau por sus repetidas "intromisiones" en una sociedad privada como es Aguas de Valencia. Aguirre, consciente de las tensas relaciones con alguno de los accionistas de AVSA, quitó hierro a estos encuentros. "Soy el responsable del servicio de abastecimiento y es lógico que mi vida transcurra en los ayuntamientos", dijo el directivo, quien insistió en que no mantenía estos encuentros en representación de los accionistas. El ejecutivo, que dejó el consejo de AVSA el pasado mes de febrero, pretende que el Ayuntamiento obligue a la futura adjudicataria a que asuma los 400 empleados de AVSA -Aguirre estaría dentro de este grupo-, adscritos a la prestación del servicio a la ciudad de Valencia. "No tiene sentido que este personal se quede en Aguas de Valencia si no renueva el contrato", manifestó Aguirre, que continuará sus entrevistas con el resto de partidos.

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